1. MEMORIAS LESBICAS 2


    Fecha: 05/04/2021, Categorías: Lesbianas Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... antes, en ese entonces las lesbianas no éramos tan abiertas ni aventadas como lo son hoy, teníamos que ser más discretas todo hay que decirlo, mi falta de experiencia y madurez, y sobre todo la falta de algún apoyo, me hizo cometer errores y equivocar mis deseos e impulsos, y sobre todo con personas con las que quizá no debí acercarme pero bueno, todo fue parte de un aprendizaje, y no voy a negarlo, ese día estaba yo sumamente cachonda, o como algunos latinos lo definen, andaba urgida, ninguna caía en mis redes y yo no sabía que hacer, y como es normal en estos casos todo sucedió de manera casual y sin planearlo Llegué a la biblioteca a hacer una investigación para una tarea, había quedado de verme con una compañera que me atraía hasta cierto punto, no era guapa pero como dije, mis opciones de conquista se habían ido acabando rápidamente, mi intención era quedarme con ella hasta tarde e intentar seducirla, pero a último momento me dejó plantada, aquello me frustró muchísimo pero igual tenía que realizar mi parte de la tarea, por lo que algo irritada me dispuse a hacer lo que tenía que hacer, que más daba, ya estaba ahí. asi que me acerqué al mostrador de la recepcionista, la Sra. Preston, para pedirle un libro en específico, cuando de pronto y por alguna razón (imagino que fue por la calentura y frustración que ya traía anteriormente) me fijé detenidamente en sus tetas, eran enormes y aun se mantenían firmes, carajo ¿por qué nunca antes las había notado? la sra. Preston era ...
    ... prácticamente una anciana, la típica bibliotecaria (las caricaturas de hoy prácticamente las han estereotipado) y no es por casualidad, así era la Sra. Preston, bajita, de pelo corto y canoso, con unas gruesas gafas que ajustaba a su cuello con un llamativo cordón, no era regordeta de la cara pero su trasero era grande en comparación a su complexión, y jamás en mi vida me había fijado en ella de esa manera, su piel arrugada era muy blanca y tenía unos ojos azules bellísimos, se notaba que en algún momento de su juventud había sido atractiva, sus labios eran gruesos y sensuales, pero la horrible papada que le colgaba terminaba de arruinar el cuadro completo ¿qué me ocurría? era una vieja por Dios, ¿tan necesitada estaba yo? tal vez, porque necesitaba verle las tetas de nuevo solo para comprobar que no me lo estaba imaginando, después de un par de discretas miradas, confirmé que sus senos de verdad eran grandes y redondos, y pese a su edad aún se mantenían respetablemente erectos, podía notarlos a través de su blusa verde con cuello de tortuga, pero la Sra. se mantenía a lo suyo sin prestarme la menor atención, siempre había sido muy amable y atenta con todo el mundo, no era para nada amargada y hasta ese momento me había parecido la vieja más aburrida del mundo, ¡que equivocada estaba! como ya era normal en esas épocas, la biblioteca estaba casi vacía, solo estaban un par de personas por ahí que ya no recuerdo, me encontré con la mirada de la sra en un par de ocasiones, solo me ...
«1234...7»