1. Mis dos familias - 01 de 10


    Fecha: 23/02/2021, Categorías: No Consentido Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    ... tiempo, tu alejamiento en el verano os ira bien a todos, rechazaste a Álex que realmente te ama. -notaba como mi cara se ponía roja, me daba cierta vergüenza reconocer que escogí lo peor y no había vuelta atrás, tampoco era para que me lo recordara a cada momento.
    
    -Don, consigues que me ponga rojo. -volvió a reír, ahora con ganas moviendo todo el cuerpo aferrándose al volante con fuerza, tensando sus grandes y velludas manos y poniéndose también algo rojo.
    
    Llegábamos a su bonita y enorme casa, rodeada de un exuberante y gran jardín, que mi madre y yo compartíamos desde hacía once años con él, cuando este lugar nos lo ofreció como hogar.
    
    (Fernando, don Fernando como lo llamaba mamá, que luego quedaría en un simple Don para mi. En aquel momento le odie unas horas, pocas porque resulto genial.)
    
    ———————————
    
    Lara y Javier, mis progenitores, se casaron muy jóvenes, y fui el único culpable.
    
    Tenían 16 años cuando entre juegos, amor y sexo me concibieron. Por motivos que desconozco decidieron tenerme y permitirme que viniera a este mundo en lugar de deshacerse de mi.
    
    Después de mi nacimiento vivieron cada uno en la casa de sus padres respectivos. Eran unos niños que jugaban a amarse y sacar la fogosidad de sus cuerpos jóvenes y hermosos, descubriendo los placeres del sexo…, y lo que podía conllevar.
    
    Se vieron a escondidas el poco tiempo que podían y no habían escarmentado con lo que les sucedió conmigo, el lugar era la casa de un amigo de Javier, mi padre, ...
    ... pasaban ratos que aprovechaban en la cama, y resultó milagroso que mi madre no volviera a quedar embarazada. Así pasamos dos años, viviendo mi madre y yo, en la casa de mis abuelos maternos, gente humilde pero con lo suficiente.
    
    Se casaron con dieciocho años, casi diecinueve, la edad que yo tengo ahora y me parece espantosa la responsabilidad que asumieron. Hablando de esa virtud tan poco practicada, creo que mi madre es la que logra ejercitarla un poco, y lo ha hecho siempre, salvo aquella primera época de su joven, alocada y enamorada vida. Mi padre es diferente y ha tardado en madurar.
    
    Sus dos familias los ayudaron lo que pudieron y mi madre comenzó a realizar pequeños trabajos continuando estudiando, Javier lo dejó todo para, según él, ocuparse de mi, (alguno tenía que cuidar al mocoso) y de verdad que para mi lo hizo muy bien, por lo que puedo recordar.
    
    Mis recuerdos, más o menos fidedignos, se remontan a cuando tenía seis años, de antes solo recuerdo inconsistencias que no podría afirmar que pasaron realmente.
    
    Solo recuerdo momentos gratos, alguno que otro no tanto, pero no resultaron dañinos y fueron breves que se olvidaban en un momento.
    
    Mi madre marchaba pronto a su trabajo y mi padre se encargaba de todo lo de la casa, sobre todo de mi. Me levantaba cogiéndome en los brazos y acunándome unos segundos hasta que abría los ojos, me daba el desayuno y sobre sus hombros me llevaba a la escuela, saltando y trotando por la calle, saludando a muchas personas que ...
«1234...7»