1. Exigiendo un aumento de sueldo


    Fecha: 09/08/2020, Categorías: Anal Hardcore, Sexo con Maduras Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... bronca:“Aquí estoy, dígame qué pretende Usted de mí a cambio de más sueldo…”El tipo carraspeó asombrado, pero recuperó enseguida su postura…“Quiero disfrutar de sus tres orificios, Ana; todavía no decidí el orden…”Le dije entonces que, para entregarle mi culo, el aumento realmente iba a tener que ser algo mucho, pero mucho más grande que “sustancioso”.El hijo de puta aceptó y dijo que podía empezar quitándome el vestido…Me acerqué hasta rozar sus piernas y le pregunté si quería verificar lo caliente que yo me encontraba…Mi jefe entonces me aferró por las caderas y me atrajo hacia él. Luego deslizó una mano bajo mi falda y pude ver un gesto de sorpresa en su rostro, cuando descubrió que yo no llevaba puesta una tanga.No pude reprimir un gemido cuando sus dedos pasaron entre mis labios vaginales y comenzaron a jugar con mi clítoris. Estuvo masajeándome así varios minutos, hasta que lo miré a los ojos y le pregunté:“Va a usar solamente sus dedos en mis tres orificios…?El tipo pareció enojarse; sacó sus dedos manchados con mis jugos y se puso de pie, para metérmelos en la boca. Me dijo que todavía le faltaba probar mi otra entrada; la trasera.Entonces me tomó por la nuca y me obligó a inclinarme en ángulo recto sobre su escritorio. Acto seguido levantó mi vestido, arrebujándolo en mi cintura y me dijo que mi orificio anal sería el primero en sentir su verga.Así recostada de espaldas a él, pude oír que abría un cajón y sacaba algo. Enseguida sus dedos engrasados con algo ...
    ... lubricaron mi entrada anal, pasando a través de mi estrecho esfínter. Gemí al sentir esa intrusión; realmente sus dedos me estaban provocando una calentura infernal…Apenas retiró sus dedos, sentí la punta de su dura verga tratando de entrar en mi ano. Empujó un poco al principio y finalmente en tres embestidas ya la tenía adentro por completo. Comencé a gemir de placer.El muy turro se inclinó sobre mi cuerpo y me susurró al oído:“Siempre he querido romperle el culo, Ana, lo he deseado desde el primer momento, cuando Usted atravesó esa puerta por primera vez…”Luego comenzó a dar embates cada vez más violentos, tratando de llegar más adentro todavía, hasta el fondo en mi ano.Ambos comenzamos a jadear y yo fui buscando acompañar sus embates, para tratar de sentir placer en vez de dolor. El tipo interpretó que por eso me estaba gustando y comenzó a bombearme con todas sus ganas, sin demostrar misericordia alguna.Yo continué moviéndome igual, yendo al encuentro de su dura verga. Me estaba gustando la forma en que mi jefe maltrataba mi culo, pero pensaba que me había dejado sodomizar por semejante turro solamente por un aumento de sueldo y pensaba que por eso me estaba prostituyendo…Cuando mi jefe tensó su espalda, salí de mis cavilaciones, sabiendo que iban a llenarme el culo de semen. Así fue; en pocos segundos el tipo se quedó quieto, se aferró con firmeza a mi cintura y descargó una abundante cantidad de líquido caliente en el fondo de mi castigado ano…Estuvo así enterrado en mi culo, ...