1. Inmigrante (10)


    Fecha: 28/07/2020, Categorías: Sexo Oral Autor: AMorboso, Fuente: CuentoRelatos

    ... Marga.
    
    -Marga, por favor, ¿Puede venir al dormitorio?
    
    -¿Pero qué haces? ¿Estás loco? ¿Cómo se te ocurre llamar a la criada? Tenemos que ponernos algo encima.
    
    No la dejé moverse ni bajarse, no obstante, sus movimientos con mi polla dentro de ella, me estaban dando placer y mucho morbo. Enseguida apareció la criada, que se quedó cortada un instante, pero que enseguida preguntó, mientras su señora escondía la cara en mi hombro.
    
    -¿QQQué desea, señor?
    
    -Por favor, Marga, puede abrirnos la cama para continuar.
    
    -Sssí, señor.
    
    Todavía estaba abriéndola, cuando caímos los dos en ella y me puse a besarla y follarla con pasión.
    
    -MMMmmm MMMmmmm Ooooohh
    
    Le costó muy poco volver a tener un fuerte orgasmo. Me detuve y observé que había quedado con los ojos cerrados. Me separé un poco, dejándome caer a su lado y sacando mi polla, que quedó a la vista con todo su esplendor, y vi que Marga nos observaba de pie junto a la cama y que sobre todo, su mirada recaía en ella. Cuando vio que la miraba, preguntó:
    
    -¿Ddddesea algo más?
    
    -Por ahora no, Marga, ya te llamaremos.
    
    Ana abrió los ojos y se abrazó a mí, riéndose. Luego se bajó a mi polla y se puso a hacerme una mamada, hasta que me corrí en su boca, tragando todo. Después, nos quedamos dormidos.
    
    Hasta que los niños cumplieron los siete meses y ya tomaban más alimento que leche y las tomas se distanciaron a la mañana y la noche, vivimos una rutina sin variaciones.
    
    Todas las noches follaba con Ana, cuando ...
    ... salía de trabajar, comía con Marta en un restaurante cercano, y nos íbamos a la oficina, donde teníamos un largo sofá para visitas que nunca venían, y donde, a puerta cerrada, unos días me hacía una mamada (la mayoría), mientras ponía su culo a mi alcance para que yo disfrutase acariciándoselo, dándole fuertes palmadas y metiéndole los dedos en el coño, hasta que conseguía que me corriera, generalmente, después de dos o tres orgasmos suyos.
    
    Otras veces, la enculaba y/o follaba por el coño.
    
    También, cuando Marga tenía su día libre, que generalmente era sábado o domingo, yo ponía como excusa el ir a la oficina a repasar papeles para ir a su casa y disfrutar de ella.
    
    El resto del tiempo libre lo dedicaba íntegramente a mis hijos. Cuando Ana volvió a trabajar, me iba a casa, donde alternaba con Marta y Marga, o con ambas a la vez.
    
    Yo no sé si Ana se acostaba con alguien fuera de casa, pero en todo momento evitó que durmiese con Marta, haciendo que la follase todas las noches, cosa que yo hacía con mucho agrado.
    
    Casi sin darme cuenta, los niños cumplieron el año, ya daban sus primeros pasos y nos obligaban a estar más pendientes de ellos, cuando recibimos la citación del notario para hacerles una prueba de paternidad y pasar toda la herencia a Ana si todo era correcto.
    
    El día que tomaron las muestras para comprobar los adn’s, estábamos cenando los tres, Marta, Ana y yo, cuando al terminar, me dijo Ana.
    
    -Bueno, Jomo, ya no queda nada para que todo esto termine. El ...