Gloria y su abuelo
Fecha: 08/07/2020,
Categorías:
Voyerismo
Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos
... fresa, delicioso.
Gloria, sonriendo les dijo:
-Y mete unas borracheras de cojones.
-Bueno, vayamos al grano.
El grano allí era el cereal, Gloria pensó que quería algo de comer.
-¿Qué quieres de picar?
-Nada. Lo que quiero es hablar de tu abuelo.
-¿Es muy grande el grano?
-Era una manera de hablar. A tu abuelo tienes que lavarlo con agua y jabón perfumado.
Gloria puso cara de, ¿qué dices?
-¿Perfu, qué?
El camillero más joven, le dijo al mayor:
-Dale un par de pastillas de jabón del nuestro.
El camillero fue a la ambulancia. Gloria le dijo al camillero joven:
-¿Al lavarlo todos los días no encogerá? A lo largo no importa, pero a lo ancho, ya no es nada...
Gloria tenía la ropa y la cara manchada. El joven aguantó la risa, y le preguntó:
-¿Cuánto tiempo hace que no te lavas?
Gloria se puso en plan coqueta:
-¿Me estás tirando los tejos?
-¡No!
-¿Entonces para qué quieres que me lave?
-Te pregunté cuanto tiempo hace que no te lavas, no si te querías acostar conmigo.
-Así se empieza, así se empieza.
Volvió el camillero. Le dio el jabón. Gloria lo olió, y le dijo:
-Esto huele mejor que mi coño.
El camillero joven, dijo:
-Houston, tenemos un problema.
Gloria miró para el camillero mayor, y le dijo:
-No le hagas caso, Houston, el problema lo tiene él. Quería que me lavara y todo.
-Y debes lavarte. ¿No pensarás lavar a tu abuelo con las manos llenas de tierra?
-¡¿Todos los días?!
-Todos, y con ...
... jabón perfumado. Y cambia esa ropa.
-¡Otro! En la ciudad andáis salidos.
-Me has mal entendido, pero una cosa te voy a decir, creo que bajo toda es roña hay una joven bonita.
-No me decían eso desde... desde nunca. Debe ser el vino el que te hace hablar así. ¿Quieres otra taza?
El camillero, sonriendo, le respondió:
-No, gracias. Dentro de un mes volveremos para llevar a tu abuelo al hospital.
Los camilleros le dieron las tazas vacías y se marcharon. Gloria entró en casa y se puso a hacer la comida. Iba a asar un pollo.
Al llegar la noche, Gloria, se fue al río con el jabón perfumado y ropa limpia. Se bañó, se cambió de ropa y volvió a casa. Con una palangana mediada de agua, un trapo y jabón se fue a la habitación de su abuelo.
-Vamos a quitar la mierda, abuelo.
Jaime se incorporó un poquito y Gloria le quitó la camiseta.
-El can famélico del Desaborido tiene más carne que tú. Como me encojas vamos a tener un disgusto.
-No encojo, mujer, no encojo.
Le lavó el pecho, los sobacos y la espalda. Le quitó el calzoncillo y la vio.
-¡Pedazo de bicho! No sabía que los carallos de los hombres eran tan grandes.
Le tocó con un dedo para ver si estaba viva.
-¡Menos mal que está muerto!
Al lavarla y lavarle los huevos, la tralla empezó a engordar. Gloria hablaba sola.
-Con el agua engorda. Houston, tenemos un problema.
El abuelo le preguntó.
-¿Quién es Houston?
-Uno de los ambulancieros. No me dijo que hacer en este caso, y me ...