1. La historia de Ángel, solo era un muchacho (16)


    Fecha: 25/06/2017, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    ... de las manos a un chico y esperé a que me afinara mi guitarra, el pasado día no me había parecido que sonaba bien.
    
    Me tenía preparada una pequeña pieza del maestro Moreno Torroba y debía practicar con ella, cuando terminé bajé a los vestuarios para cambiarme, llegaba con un poco de retraso porque Martina no me había dejado que me fuera sin terminar el ensayo.
    
    Estaban ensayando tango y Noa tenía de pareja a Ian, me senté un momento observando sus evoluciones, llevaban el paso exactamente sincronizado, y estaban tan concentrados en lo que hacían que ninguno se dio cuenta de que había llegado. Guido fue el primero y dejó de bailar, lo estaba haciendo con un chico y se me hacía muy raro ver una pareja de hombres bailando tango.
    
    -¿Otra vez Martina? -se pasó el brazo por la frente para quitarse las gotas de sudor.
    
    -Es muy exigente, no permite que dejemos a medias el trabajo. -me sujetó de la mano y tiró de mi para separarme de la barra de apoyo ante el espejo.
    
    -Ensayemos mientras Noa termina con Ian y se ocupa de ti. -no estaba tan mal, bailar es bailar y no importa que sean hombre o mujeres.
    
    Luego me cogió Noa por su cuenta y no me perdí la mirada provocativa que Ian me dirigía, algunos ensayaban los pasos sin pareja durante unos momentos o comenzaban a cambiarse. Quedé enfrente de Ian y me tomó de la cintura, sentía su abrazo apretando demasiado, posesivo, sin permitirme moverme a mi gusto.
    
    -Más ligero Ian, me equivocas. -en ese momento venía un ...
    ... rendimiento de cuerpo, y me dejé llevar por su brazo en la baja espaldas mientras él me sostenía en el aire para que no cayera, apoyó intencionadamente la entrepierna en la mía haciendo que notara el bulto de su aparato reproductor sobre el mío.
    
    Tiró de mi para elevarme y en un vuelo que seguía me susurró al oido.
    
    -¿Lo notaste? mi verga esta hambrienta. -sentía que comenzaba a sudar, más por la emoción de sus palabras que por el esfuerzo físico.
    
    Al fin terminó ese baile y todos los que seguían después hasta finalizar la clase, descansamos un momento antes de encaminarnos a los vestuarios. Nos habíamos quedado en la sala Guido, Ian y yo, el resto había salido y Guido comenzó a darme consejos sobre algunos movimientos haciendo que los repitiera, tenía a Ian a mi espalda pero podía ver las evoluciones que hacía a través del espejo que cubría la pared.
    
    Mientras Guido me hablaba yo prestaba más atención a la figura de Ian que a sus palabras hasta que se dio cuenta y se quedo callado mirando lo mismo que yo.
    
    -Es increíble, tiene el mejor cuerpo que haya podido ver. -verdaderamente impresionaba cuando se estiraba y se encogía en cualquier movimiento, haciendo que sus músculos se movieran como una máquina perfecta, y como se tensaba el pequeño culo respingón y alto lleno de duros músculos, y el enorme paquete de sus genitales que las mallas ajustadas hacían que se viera más grande.
    
    -Yo voy a ducharme y cambiarme de ropa para marchar. -me di la vuelta para ir a la salida, no ...
«1234...8»