1. July, mi vecina madura amiga de mi madre


    Fecha: 06/03/2020, Categorías: Hetero Autor: Ser39, Fuente: CuentoRelatos

    ... escalera la abracé por detrás rozando mi polla en su culo y le dije al oído. Esto es por ti y estará así tantas veces como quieras. Enséñame y aprenderé contigo July. Te deseo! Hagámoslo aunque sea una vez, no se enterará nadie de verdad.
    
    Ella asintió con la cabeza mientras para mí sorpresa empezó a restregar su culo contra mí polla.
    
    -Siiiii. Nos lo merecemos. El sábado y domingo estoy sola, Teo se va todo el finde de caza y mis hijos a pasar 15 días al pueblo, iba a ir con ellos pero cambiaré de planes y me quedaré poniendo alguna excusa para quedarme.
    
    Se dio la vuelta nos besamos, nos sobamos mutuamente y yo me quedé en el 2°izda que es donde yo vivo y ella subió al 3° derecha mientras yo me quedé mirando como movía ese cuerpo que tanto me ponía. Ella giró su cabeza sabiendo que yo la miraba y sonriendo con complicidad me guiño un ojo y me dijo:
    
    -Estoy deseando que llegué el momento vecino, tanto cómo tú.
    
    Entré en mi casa emocionado y cachondísimo pensando en lo que había pasado y en lo que habíamos quedado. Me hice dos pajotes seguidos pensando en ello.
    
    El día siguiente era viernes y me levanté feliz. Fui a trabajar y pasé todo el día pensando en el fin de semana que me esperaba y en todo lo que haríamos July, mi deseada vecina y yo. Nervioso y ansioso como buen primerizo.
    
    A la tarde al llegar a casa la vi en el balcón y la saludé sin dejar de mirarla y le hice un gesto que en broma le hice entender que ya me había puesto la polla en marcha y se ...
    ... reía.
    
    Al rato estaba yo en casa viendo la tele y sonó el timbre, mi madre abrió y dijo:
    
    -Hola July, pasa y siéntate mujer. Al oírlo me levanté y fui a la puerta habiéndome el sorprendido y saludándola amablemente. Ella me dijo:
    
    -Hola Sergio vecino, cuanto tiempo, dame dos besos corazón.
    
    Me acerqué a dárselos con mi mano en la cintura y ella al darse mi madre la vuelta me agarró del culo y me apretó contra su cuerpo, a lo que mi polla reaccionó enseguida y entonces se separó para dejarme en un pantalón corto de pijama, sin calzoncillos y empalmado en la cocina delante de mí madre. Me miró muy pícara y dijo.
    
    -No te vayas vecino, ven aquí que tengo que pedirte un favor.
    
    Amablemente fui sin saber cómo hacer para disimular mi polla que se quería salir del pantalón por un lado. Improvisé.
    
    -July, siéntate mujer. Eché la silla para que lo hiciera disimulando con el respaldo mi paquete para que no me viera mi madre y me quedé detrás de ella disimulando hasta que pude sentarme.
    
    Ella sonreía y me miraba con cara de pícara riéndose disimuladamente. Entonces estando sentado enfrente de ella noté un pie descalzo que rozando mi muslo llegaba a entrar por dentro de la pata del pantalón y empezó a rozar mi rabo durísimo con mucho disimulo mientras yo pensaba que me iba a correr ahí mismo. Ya paró y después de un rato de charla me pidió a ver si podía subir con ella a poner dos baldas que había comprado que Teo llevaba siete meses sin colocar por su dolor de espalda.
    
    -Sube ...
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