1. Mi querida suegra


    Fecha: 16/02/2020, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... mis cuñados dormían juntos y cerraron la puerta del dormitorio y yo me fui con mi hijo al mío, este quedaba justo enfrente del de mis suegros y yo no cerré la puerta, dejándola un poco abierta, mis suegros si la cerraron como de costumbre.
    
    Mi polla se puso gorda nada más pensar en que cualquier día me follaría a mi suegra. De esa manera me quedé dormido un par de horas, de pronto desperté, podía notar como todos dormían, me levanté para ir al cuarto de baño, y mi corazón empezó a latir fuerte cuando vi que la puerta del dormitorio de mis suegros estaba abierta, escuché tras la puerta y solo podía escuchar una respiración y parecía la de mi suegro, así que mi suegra no estaba en el dormitorio ni en el cuarto de baño ya que estaba vacío, mi polla empezaba a crecer por momentos, todo el piso estaba a oscuras aunque era fácil caminar ya que se veía bastante bien, pude ver a mi suegra sentada en unas de las butacas en el balcón, me acerqué y parecía dormida, me saqué la polla y empecé a hacerme una paja delante suya, cada vez podía ver mejor, poco a poco pude notar como sus pezones se estaban poniendo duros y abultaban debajo de su camisón, aquello me hizo reaccionar y me acerque colocando mi mano sobre ella, primero suave, podía notar su pezón duro entre la tela y mi mano, y me atreví a meter mi mano por dentro, el tacto era suave, estaba súper blandita y su pezón duro como una piedra, tenía botones suficientes para poder sacarla fuera y así lo hice, no me lo pensé y acerque ...
    ... mi boca, metiéndome aquella teta en mi boca, ella no hizo nada, me dejaba hacer, su pezón duro en mi boca crecía, me dejaba morderlo y chuparlo sin decir nada, intentaba sacar la otra teta del camisón pero no podía así que opté por intentar bajar mi mano a ver que pasaba, cuando sintió mi mano en su muslo abrió las piernas y me fue fácil llegar a sus vellos, una buena cantidad aun de vellos, eran finitos y se dejaban enredar entre mis dedos, abrió más las piernas para dejarme que mi mano bajara un poco más llegando a unos labios grandes, no me costó separarlos y notar como mis dedos se llenaban de una sustancia, estaba completamente mojada, yo no podía más, así que no me lo pensé y cogiéndola por la mano tiré de ella para levantarla, ella es mucho más bajita que yo, no me lo pensé le dí la vuelta y levanté el camisón, le puse la mano en la espalda y ella se dejo hacer, colocó las manos en la barandilla del balcón, y me dejó que le abriera las piernas, me cogí la polla y busque su coño con ella, me fue fácil separar sus labios aunque me costó más que mi polla entrara en esa cueva, parecía que hacía demasiado tiempo que nadie lo hacía, pero no paré hasta que mi polla desapareció dentro y mis huevos se llenaron de su flujo, la cogí por la cintura y empecé a moverme llegando a embestirla con fuerza, pero ella me dejaba hacer, aquello le gustaba, incluso ayudaba con su cuerpo, cuando cogió un poco más de confianza buscó mi mano para colocársela sobre su teta y apretarla con mi mano ...