1. La Farmaceuta - flacalisa


    Fecha: 22/01/2020, Categorías: Anal Fetichismo Sexo con Maduras Autor: gantz265, Fuente: xHamster

    ... agachada en cuclillas en el rincón, de nuevo tapándose las tetas con las manos y con cara de pánico decía: Déjame ya por favor, déjame, déjame.Como estaba así agachada, no pude resistirme a tocarla el coño por encima del pantalón, luego la agarré de los pelos haciéndola ponerse en pie y poniendo la pistola en su frente dije con voz firme:Empieza ahora mismo a bajarte los pantalones o disparo. 1, 2 y..Llorando ya desesperadamente empezó a desabrocharse su pantalón negro, mientras yo la seguía acosando diciéndole: venga, venga, más deprisa, quiero ya ver el color de tu raja.Lentamente comenzó a bajárselos y ya se veían unas pantaletas blancas.Grite: ¡Más abajo, hasta los tobillos! (ya los tenía por medio muslo)Cecilia no paraba de decir "No por favor", pero no dejaba de bajarse, poco a poco, sus pantalones. Cuando ya los tenía en los tobillos dije:Vale, date la vuelta, ponte de espaldas.Ella lo hizo y creo que hasta aliviada por ponerse de espaldas.Ahora empieza, despacito, a bajarte las pantaletas. Quiero ver ese inmenso culo.De nuevo empezó a oírse el " No, déjame, por favor ", pero con poner la pistola fría sobre su espalda, Cecilia empezó a mover sus pantaletas.Venga, bájatelas más, un poco más, un poco más, venga. Ahora que estamos terminando, ¿no querrás estropearlo todo? Venga, más, más, hasta medio muslo.Entonces me acerqué y comencé a tocarle el culo, la metí la mano entre las piernas y con un dedo la presione el ano. Ella se estremecía y apretaba los glúteos. La ...
    ... volví a tocar las tetas que ella ya no se preocupaba en taparse (tenía otras preocupaciones ahora).Venga, ahora pon las manos sobre la cabeza. (Lo hizo). Bien y ahora, empieza a darte la vuelta. Quiero conocer a tu chochote que es lo único que nos queda por ver. Venga, gírate.Ella lloraba pero no se movía.¿No te dará vergüenza a estas alturas?. Como no se movía, la pegue con la mano con todas mis fuerzas en el culo, dejándola la mano marcada y la puse la pistola en la raja del culo y dije. ¿No querrás que te entre una bala por este agujerito verdad? Y grite, ¡Pues empieza a darte la vuelta!Ahora se empezó a girar, con las manos sobre la cabeza, congestionada por el llanto y con lágrimas que chorreaban por su cara, se dio la vuelta y quedó a la vista un coño de pelo negro y bastante peludo.Cecilia, ahora ya conozco todas tus cositas, ya nada tienes que ocultarme. Sácate de los tobillos el pantalón y la pantaleta venga.Ya, totalmente desnuda, se tapó el coño con las manos y miró al suelo.Siéntate en la banqueta.Se sentó con las rodillas bien juntas. Me acerqué, la cogí las piernas por las rodillas y se las separé. No ofreció resistencia.Venga, ahora con tu dedito, métetelo en el coño. Venga, ¿o quieres que meta yo el mío?.Cecilia empezó a buscarse el agujero y se lo metió un poquito.No, así no, del todo y mételo y sácalo, venga. Ni que fuera la primera vez que lo haces. Venga.Cecilia estuvo un rato metiéndose el dedo aunque sin muestras de placer. No estaba para disfrutar la ...