1. El coño de mami


    Fecha: 10/12/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Loqui sex, Fuente: CuentoRelatos

    ... la cara de su hijo y tirándolo hacia ella. Sus labios se tocan ligeramente como besándose con miedo. Él se subió encima de ella y presionó su pene contra su vagina, que resbaló fácilmente.
    
    José empujó su pene profundamente dentro de su madre, haciendo su quejido en alta voz.
    
    —¿cuántas veces puedes acabar?
    
    —No sé, mama —él susurró mientras que comenzó a cogerla.
    
    Rosario envolvió sus piernas largas alrededor del joven, sosteniéndolo profundamente adentro de ella. Él presionó su boca sobre la suya y empujó su lengua contra su madre. Se besaron apasionado mientras que él bombeaba lentamente dentro y fuera de ella. La mente de Rosario se nubló cuando su orgasmo la golpeó. Ella gimió y golpeó violentamente debajo de él. Él sentía su coño apretar alrededor de su pene haciéndolo acabar en ella. José continuó bombeando hasta derramar todo dentro de su mama mientras que se besaban.
    
    José se puso al lado de ella y Rosario lo sostuvo firmemente mientras que cayeron dormido.
    
    Rosario se despertó temprano por la mañana con el pene duro de José presionando firmemente contra ella. Ella alcanzó por detrás, agarrando el eje grueso, lo sostuvo firmemente en su mano y comenzó a frotarlo ligeramente. José seguía dormido mientras ...
    ... que ella se deslizo debajo de las cubiertas y lo tomó en su boca. Ella lenta y suavemente aspiraba su pene. Inhalación el olor de su hombre joven. Llevo una mano hasta sus testículos y ligeramente la ahuecaba, estaba sintiendo como se llenaban de leche en su boca.
    
    José se despertó con su pene en lo profundo de la garganta de su madre. Ella miraba para arriba a su hijo joven, hermoso y continuó aspirándolo. Su lengua resbaló arriba y abajo del eje que pulsaba grueso, haciendo gemir en alta voz.
    
    —Mama por dios que despertar más lindo. —Él grito.
    
    Rosario sentía su pene palpitar, como su caliente semen entraba en erupción en su boca.
    
    Rosario tragó hambrienta cada gota sabrosa, haciendo al cuerpo joven de su hijo gravitar violentamente. Él empujó contra su boca, vaciando toda su leche en ella. Rosario movió su boca arriba y abajo de su pene puliéndolo hasta que las gotitas restantes hubieran desaparecido.
    
    Ella subió hasta el respaldo y besó a José.
    
    —Mmmm, que bueno este desayuno que me da mi muchacho, mi bebé, mi sueño.
    
    José todavía le da masajes a su madre y su esposa, lo piensa es un hijo realmente bueno, para hacer viajes diarios hasta la casa de su mama para darle masajes. Poco ella sabe de todo lo que pasa. 
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