1. La esposa de mi vecino es adicta al sexo


    Fecha: 21/11/2019, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... bella, y desperdiciada, ella al inicio me cortaba y me repetía que estaba muy enamorada de Emiliano. Crei que era cosa perdida, pero los nunca llegan. Ese día, recibiríamos encargos fuera de horario, fui a mi casa a cenar, tipo 7:00 de la noche y habíamos acordado con Esperanza vernos en la bodega de mi empresa a las 8:00 para recibir encomiendas, asi lo hicimos, las recibimos e inventariamos y tipo 8:30 terminamos. Quedamos solos adentro. Ella llevaba puestos unos pantalones apretados, su culo se lucía más que siempre, y eso combinado con tacones super altos y una blusa pegada, se miraba espectacular. Le dije que si quería una cerveza, había calor esa noche. Me dijo que si, fui a la tienda y compre cuatro, dos para uno, empezamos a tomarlas y charlar. Salió con la segunda cerveza, el tema sexual, le pregunté asi descaradamente, como una mujer tan bella como ella, con un cuerpo que pide sexo, pude evitarlo por tanto tiempo, ella se sonrojó y pensé que nuevamente saldría con eso que amaba a su marido, pero no, esa noche no. Siguió el tema ella, luego se me acercó y me dijo -qué me propones??-, la tomé y la pegué a mi, nos besamos apasionadamente, mis manos rapidamente tomaron sus bellas nalgas sobre su pantalón apretado, nuestras lenguas jugaba de boca en boca, solo nos tocabamos y pude sentir y oír que ella estaba muy excitada con tan poco, metí mis manos debajo de su blusa y atrapé sus finos senos y levantando su blusa los mamé, ella seguía excitándose más y más, no había ...
    ... visto a una mujer tan caliente. La fui colocando sentada sobre un escritorio y le quité su blusa para mamarle mejor sus tetas, luego la acosté encima del escritorio que es grande, le saqué el pantalón de su cuerpo, tenía un pequeño bikini como braguita. Mi verga ya formaba un gran bulto en mi pantalón. Le quité su braguita y frente a mi quedó su rajita, toda depilada, sus labios vaginales rosados al igual que clitoris, se veía muy deliciosa, abrí sus piernas y me sumergí en su vulva, comiendo, lamiendo y chupando todo, como si fuera la úlitma rajita del mundo, a los pocos segundos, la bella Esperanza estaba pegando unos gemidos intensos, no había problema, pues estabamos solos en una bodega grande, y estábamos hasta adentro, ella podía gritar si quería. Mi lengua se metió por todos lados incluso metí la punta de mi lengua en su vagina, mis labios tomaban por asalto su clitoris, pude sentir como bajaban sus juguitos amargos por su rajita y yo los bebía. Yo en ocasiones le miraba el rostro y podía verla hacer gestos de placer y quejarse muy rico, además en ocasiones me pedía que no dejara de comerle la cuca. Minutos después la elevé hasta un sonoro orgasmo, ella tomándome los cabellos me restregó el rostro contra su raja. Luego de eso yo sabía que debía penetrarla, puse sus pies con sus largos tacones sobre mis hombros y colocándo mi verga erguida contra su raja, la fui ensartándo, mi glande fue abriendo ese mojado y caliente orificio vaginal, ella gimió fuerte y yo la terminé de ...
«1234...»