Irma - Relatos Eróticos

Irma

... besar e introduje mi lengua en su interior aprisionando su clítoris el cual creció y seguí con mis movimientos hasta que Irma se arqueó, me tomó muy fuerte la cabeza con sus manos y se vino mucho, me incorporé y ya tenía bien dura la verga así que se la metí de un solo golpe hasta adentro, ella solo se arqueó y la recibió con gusto, empezamos a movernos muy lento, cada vez que le metía la verga trataba de hacerlo lo más profundamente que podía y luego se la sacaba hasta dejar solo la cabeza adentro, luego Irma me dijo como te gusta más le dije que parado y ella en la orilla de la cama, y le dije y a ti, ella me dijo que no había probado muchas posiciones que realmente solo así de misionero, así que le dije que si quería probar más y dijo que si, me salí y le pedí que se levantara, me senté en la orilla de la cama y la jalé hacia mi, la levanté por la cintura y ella abrió las piernas y se fué sentando de frente a mí clavándose mi verga poco a poco, así ella fue abriendo mucho las piernas y no dejaba de jadear y me decía que sentía muy rico, no nos estábamos sincronizando mucho, ya que con ciertos movimientos se salía mi verga, así que la levante, la llevé a un sillón al lado de la cama y ahíla empiné doblada hacia adelante, quedaban colgando sus piernas, me puse atrás de ella y la comencé a penetrar por su vagina, ella se acomodó y me apretaba muy rico la verga con sus músculos vaginales, así seguimos y ella se vino, paramos y la levanté y la llevé de nuevo a la cama la ...

... acosté en la orilla y parado se la volví a meter. En esta posición seguimos por un rato más hasta que se volvió a venir y con sus temblores provocó que me viniera en ella, seguimos fundidos en uno hasta que me salí y le escurría el semen por sus muslos, me acosté a su lado y nos volvimos a besar.

Ella me dijo que le había encantado estar así conmigo, que había valido la pena esperar para poder gozar así sin temores, que si estaba de acuerdo ella quería que nos siguiéramos viendo pero solo fuera de nuestra Ciudad para no tener problemas, le dije que si, que a mí también me había gustado mucho y que estaría atento a cualquier oportunidad para ponernos de acuerdo en el futuro.

Nos acostamos y nos quedamos dormidos abrazados, a media mañana otra vez nos paramos a orinar y me metía a la regadera, ella me alcanzó y nos empezamos a acariciar otra vez, ella se arrodilló y me la empezó a mamar y no paró hasta que me vine en su boca y se tragó todo mi esperma, nos enjabonamos uno al otro, nos enjuagamos y nos vestimos y salimos a almorzar, esa tarde yo tenía mi regreso en avión y ella había preferido tomar un autobús por la noche, así que me pidió que la dejara en casa de su hermana, a la cual me presentó como un buen amigo, su hermana me recibió muy bien pero puso una cara de cómo era posible que fuera un buen amigo de Irma y nunca me había conocido u oído de mi, pero al fin supongo que ellas hablarían después de mi, nos tomamos un café con ella y estuvimos conversando muy a gusto ...