El putito de la clase - Relatos Eróticos

El putito de la clase

... botón. -No hubieras aguantado con eso puesto hasta el segundo recreo, ¿crees que no vi cómo te movías para masturbarte con el plug dentro? –Juli se sonrojó al escucharlo, David rio en voz baja- Nunca te apenas cuando te manosean en clase o cuando te coge la mitad del grupo en los baños, pero si cuando te veo masturbándote? Eres un chico raro –David se acercó dándole un corto beso en los labios –Ven tenemos toda la hora para acabar lo que empezamos. Comenzaron a caminar. La suave vibración, el semen de Iván aun en su interior y la sensación del plug evitando que se cerrara su agujero tenía a Juli muy excitado, las piernas aun le temblaban pero no tanto como antes, podía caminar pero sentía su cuerpo muy caliente. Al llegar a la zona de talleres, notaron que estaban dictando clase en uno de los salones, no estaba tan cerca a los baños pero sería mejor ser silenciosos, para evitar problemas. Tan pronto David cerró la puerta, juli se lanzó a sus brazos, buscando besarle los labios, mientras con sus manos acariciaba su polla por sobre el pantalón, David encendió el vibrador a toda potencia de nuevo y bajo el pantalón y bóxer de juli, jugando con sus nalgas. Las apretaba y las abría lentamente, con sus dedos empujaba el vibrador aún más hondo en el cuerpo de juli, llenándolo de placer, las piernas de juli empezaban a fallarle de nuevo. David lo sentó en el mesón del lavamanos y le quito el pantalón y bóxer, juli instintivamente se abrió de piernas, David retiro lentamente el plug ...

... vibrador apagándolo en el proceso, podía ver el abierto agujero de juli derramando el semen de Iván. Se besaron de nuevo, era un beso apasionado, carnal, lleno de lujuria, tocaban sus cuerpos buscando ser uno. Juli sentía el pene de David entrar sin ningún problema, el plug lo había mantenido abierto y el semen que tenía dentro servía de lubricante, por fin lo que tanto había deseado se cumplía volvía a sentir aquella gruesa, dura y caliente verga abriéndose paso por sus paredes anales. Cuando David empujo su verga con fuerza hasta el fondo, del minúsculo pene de juli empezaron a saltar gotitas de semen, se estaba corriendo tan solo con sentir a su hombre dentro, David no pareció notarlo y empezó a bombear con firmeza. Juli intentaba ahogar sus gemidos, hasta que David empezó a aumentar el ritmo, llegando más profundo en su interior, juli se entregó al placer y empezó a gemir, abrazó sus piernas hacia su torso permitiendo que David entrará aún más dentro de sí, estimulando zonas donde nadie más había llegado, juli lo gozaba como nunca. David lo tomó de las caderas bufando, le dió un rápido beso y comenzó a meter y a sacar su pene arrebatadamente, cada vez más rápido y tan hondo como era posible, el sonido provocado por el chocar de sus cuerpos hacía eco en el recinto hasta que juli sintió como David empezaba a llenarlo de abundante semen, él mismo se había corrido tres veces mientras este lo cogía, sentía su cuerpo agotado pero estaba satisfecho. David salió de su interior y ...