1. Fantasía cumplida: Mi esposa probó a dos negros


    Fecha: 24/08/2019, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... rico que empezaba a sentir, pero, sin embargo accedí a su requerimiento pensando en experimentar cosas nuevas. El negro era alto, más alto que tu, mi querido esposo, y su pene parado y duro apuntaba desde mi ombligo hacia arriba y por lo tanto no me excitaba pues me habría gustado sentirlo en mi vagina. Me soltó, se paró a un lado y me dijo que bailara para él. No soy experta en el arte de bailar pero hice un show aceptable como para un cabaret dándome ganas al mirar esa hermosa verga parada frente a mi invitándome a que me la comiera. Nuevamente me acerqué hacia él y fui directamente a su pene agarrándolo con ambas manos y abriendo mi boca me comí la mitad de esa hermosa verga pues no podía comérmela toda por su gran tamaño. Al empezar a saborear ese delicioso manjar súbitamente me apartó y me dijo que no siguiera, que ese era su punto débil. Es decir que si se lo mamaba iba a terminar muy rápido y en mi boca. Nuevamente cortada y desconcertada no sabía que hacer y lo peor era que me enfriaba totalmente y tenía que volver a empezar. Le dije que quería una última pose para terminar la sesión y le dije que se tumbara de espaldas en la cama pues quería hacer el caballito. El pene del negro se había enfriado también y como no me permitía mamárselo para reanimarlo me acosté sobre su pecho para sentir todo su cuerpo frotándome contra él. Empecé a besar esos labios finos que es muy raro ver en un negro , besar su cuello, sus tetillas y si es verdad lo del olor peculiar de los ...
    ... negros pues en ese momento que trataba de calentarme y al no lograr la arrechura necesaria instintivamente alejé mi cara de su cuerpo y me puse sobre su pene cogiendo con una mano y frotándolo en mi cosita . Me costó un poco pero logré introducirlo totalmente en mi coño hambriento de placer y de verga y empecé a cabalgar sobre mi negro logrando llegar mis primeros quejidos de arrechura. Yo quería sentir uno o varios orgasmos pero su pene no estaba tan duro como al principio, lo sentía que se doblaba al hacer mis movimientos, incluso algunas veces se salía y tenia que volver a introducirlo y esto me quitaba concentración. Cerré los ojos tratando de explotar pero no pude y use la estrategia del engaño, grité como si estuviera gozando y simulé terminar en un orgasmo fabuloso. Me bajé y noté que mi vagina estaba chorreando semen del negro. La explicación de la flacidez del pene era que el ya se había hecho dentro de mí cuando yo aun no estaba ni por la mitad del acto sexual. Me vestí rápidamente pues no quise usar la ducha y le dije adiós ; el levantando la mano me dijo chau nena cuando quieras me buscas". Y eso fue todo. Acaricie a mi esposa y le dije que no se traumatizara por lo sucedido y que ya tendríamos oportunidades de encontrar algo mejor y a su gusto. Nos acariciamos y dejando la toalla a un lado hicimos el amor como solo nosotros lo sabemos hacer. Toda los días siguientes de la semana mi esposa se lamentaba del incidente con el negro fino y me preguntaba si todos los negros ...
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