1. Mi hijo dotado


    Fecha: 28/07/2019, Categorías: Bisexuales Autor: Cabrera1993, Fuente: CuentoRelatos

    ... lamerse. Los dos nos exploramos las bocas muy despacio. Mi madre puso sus manos alrededor de mi cuello y yo alrededor de su espalda, acariciándola cariñosamente. Luego, mi madre y yo paramos de besarnos y ella me dio un beso en la mejilla y dio unos pasos ligeramente invitándome a seguirla hacia su dormitorio. Era preciosa hasta vista desde atrás. Su firme culo tenía una forma perfecta, aunque ella creía que era demasiado ancho y sus blancas y esbeltas piernas eran preciosas.
    
    Yo la seguí de inmediato hacia su habitación y ella se dirigió hacia su lado habitual de la cama. Miré a mi alrededor mientras ella se sentaba sobre el filo de la cama y vi que había varias cajas de colores distintos cada una. Mi madre cogió una y la abrió. Luego sacó una tira de plástico blanca dividida en tres y arrancó una.
    
    -¿Qué son esas cosas, mamá…? -le pregunté mientras me acercaba a ella de rodillas por encima de la cama desde el otro lado de ésta.
    
    -Son preservativos, cariño… -me respondió dulcemente.
    
    -¿Preservativos…?
    
    -Sí, también se les llama condones…
    
    -¿Para qué son…? -pregunté
    
    -Pues verás, son unos trozos de un material que se parece al plástico que se llama látex. Son como globos desinflados y se mete la colita dentro de ellos antes de meterla en el chocho de una chica…Así, el semen se queda en ellos y la chica no se queda embarazada… -me explicó
    
    -Ah…Y… ¿me vas a dejar que meta mi colita en tu chocho…?
    
    -Sí, nene…quiero que me la metas en mi agujerito -me dijo mi ...
    ... madre cogiéndome de la mano de nuevo y acariciándomela nuevamente.
    
    Mi madre dejó el preservativo y la caja sobre la mesilla de noche junto a las otras cajas sin estrenar y me empujó sobre la cama. Yo caí de espaldas sobre ésta con mi pene aún erecto y con el glande violáceo y húmedo. Mi madre rio como una niña y se sentó a horcajadas sobre mis muslos. Entonces recorrió mi abdomen y mi pecho con sus manos para luego echarse hacia delante y besarme de nuevo en la boca. Sus tetas se echaron hacia delante también y presionaron contra mi pecho. Mi pene quedó bajo su barriga, horizontalmente sobre mi abdomen.
    
    Nos estuvimos besando durante unos cinco minutos. Mi madre se puso de rodillas y me dijo que colocara la cabeza sobre la almohada. Yo lo hice así y ella se acercó a mi desde un lado y me empezó a masturbar lentamente. Luego bajó su cabeza y lamió muy despacio u minuciosamente mi glande. Luego recorrió todo mi pene hasta abajo y finalmente se retiró y se tumbó a mi lado. Entonces los dos comenzamos a magrearnos. Yo estrujaba sus tetas y ella mi pene y mis bolas, pero sin masturbarme. Luego yo bajé mi mano hasta su vulva y descubrí lo húmeda que estaba. Ella gimió ahogadamente cuando recorrí su raja con uno de mis dedos y luego toqué ligeramente su clítoris. Entonces se me ocurrió la idea de probar a qué sabía mi dedo y me lo llevé a la boca, descubriendo un sabor nuevo y estimulante que me hizo perder todo control de mí mismo.
    
    -Mamá… -dije
    
    -¿Qué, cariño…?
    
    -¿Puedo ...
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