1. El "mirón", una desconocida (2ª parte)


    Fecha: 08/05/2019, Categorías: Lesbianas Voyerismo Masturbación Autor: yohy, Fuente: xHamster

    ... que la invité a ir a la habitación de invitados que estaba libre (mientras mi chico estaba en la habitación de al lado, es decir, la nuestra habitualmente).Se me hizo interminable el pasillo que separa el salón de la habitación. Al llegar a la misma, encendí una lámpara que tengo en la mesa de noche y que tiene una luz muy suave y cálida, perfecta para la ocasión. La senté en la cama, y mientras yo permanecía de pie, le quité su camiseta. Ella con el torso desnudo, pechos pequeños, y ni muy delgada ni muy gorda, más bien tirando a normal en lo que se refiere a su vientre.Laura puso sus manos sobre mis nalgas por encima del pantalón de pijama, ya que seguía vestida, y me apretó contra ella. Ya me notaba con más seguridad, al fin y al cabo estaba en mi territorio. Le retiré las manos de mi trasero, y se las coloqué sobre su pecho, en una clara indicación, que sin hablar le decía: "tócate las tetas y mírame". Como si llevásemos toda la vida juntas, así lo hizo.Ese momento fue perfecto para yo hacer mi juego. Le di la espalda, y fui bajándome lentamente el pantalón de pijama, dejándole ver mi tanga poco a poco. Ella, obediente, seguía tocándose el pecho cuando una de las veces miré de reojo. Una vez me lo quité del todo, no se pudo resistir: con un giro brusco, me volvió a poner en la posición inicial, frente a ella (ella sentada y yo de pie) y con sus manos en mis nalgas: "me tienes a tope", me dijo. De frente a ella seguía, y con sus manos apretándome el culo, cuando me ...
    ... quité la camiseta grande que llevaba puesta, dejando al aire mis pechos, bastante más voluminosos, y quedando unicamente en mi el tanga.Ella se levantó, y agachándose algo, comenzó a chuparme uno de los pezones, mientras con una mano acariciaba mi pecho suavemente, con la delicadeza de quien sabe como tocar para excitar más, mucho más, y con otra mano que se paseaba entre mi cintura y mis caderas con la misma dulzura erótica. Suelo exitarme mucho con las experiencias nuevas, pero estoy escribiendo esto, y juro sin exagerar que se me pone la piel de gallina de acordarme de Laura.Con mucha sutileza, Laura dejó mi pecho para centrarse nuevamente en mi boca, me besaba con suavidad pero profundamente, se le notaba caliente, pero a la vez consciente de hacerlo con tranquilidad para alargar el momento. Ahí fue cuando noté sus dos manos bajando desde mi espalda hasta el tanga, el cual me empezó a bajar lentamente. Al llegar a donde no le alcanzaban las manos mientras me besaba, comenzó a recorrer con sus labios mi cuerpo. Primero el cuello, el pecho entre las dos tetas, el vientre, el ombligo, el pubis... y me quitó el tanga del todo. Ya en esa posición, se sentó de nuevo, y me acercó a ella como diciéndome: "quiero que me lo traigas a la boca". Sentada en el borde de la cama, fue tumbando su cuerpo hacia atrás, mientras me dirigía perfectamente, acercándome a su boca. Yo de rodillas, sobre la cama y con las piernas abiertas. Ella, acostada, aunque con las piernas colgando, tocando el ...