1. Drogué a mi prima


    Fecha: 18/03/2019, Categorías: Sexo con Maduras Tabú Autor: Calenton87, Fuente: xHamster

    La historia que a continuación les narraré sólo es producto de mi imaginación, de las maquinaciones que durante mucho tiempo he hecho con respecto a mi prima. Espero sea de su agrado.Hace cuatro años me mudé a la Ciudad de México para estudiar la Universidad, llegué a vivir con una prima que tiene el doble de mi edad, es decir, actualmente tiene 53 años, aún así posee un muy buen cuerpo, tiene unas enormes tetas (tallas 38 doble D) una diminuta cintura y un buen trasero, ella es bajita y un poco mojigata, trabaja como maestra en un colegio católico.Desde que llegué a vivir con ella no podía evitar sentirme un tanto atraído por esas enormes tetas. Después de unas semanas de vivir juntos comenzamos a tener más confianza mutua, encontraba sus brasieres y tangas por ahí, me pedía que le pasara la toalla cuando se bañaba o que le ayudara a abrocharse el brasier, cosas “inocentes”.Después de algún tiempo de tener pensamientos “impuros” con mi prima llegó de visita mi tía, o sea, su mamá, y entre las medicinas de ella encontré algunas pastillas para dormir, de pronto tuve una idea, le robé algunas pastillas a mi tía y las guarde esperando el momento oportuno. La verdad tenía miedo de hacer algo con ellas pero cada día deseaba más y más a mi prima.De pronto el momento llegó, era uno de esos días que te excita hasta ver volar una mosca, mi prima llegó de su trabajo y me pidió que le preparara un sándwich mientras ella se bañaba. Saqué una de las pastillas que tenía escondida y la ...
    ... molí hasta hacerla polvo, la esparcí entre la mayonesa con el temor de que mi prima se diera cuanta de que el sabor era raro, me arriesgué. Ella salió del baño solo en su bata y yo le entregué el sándwich, lo comió como si nada mientras yo moría de nervios. Terminó su sándwich y como a los veinte minutos noté que ya estaba dormida, mi plan había funcionado. Esperé un rato más para que entrara en un sueño más profundo.Después de casi una hora creí que era el momento adecuado para actuar. Con mucho temor entré a su cuarto preguntándole si estaba dormida, no obtuve respuesta. Me acerqué más a ella y le toqué el hombro sacudiéndola un poco y preguntando nuevamente si estaba dormida, nuevamente no obtuve respuesta. Estaba profundamente dormida. Con mucho cuidado y aún temeroso deshice el nudo del listón de su bata de baño, siempre pendiente de que mi prima pudiera abrir los ojos. Abrí su bata y me encontré con sus enormes tetas que se movían al lento ritmo de su respiración y más abajo su velludo pussy con unos prominentes labios que sobresalían de entre la negrura del vello.Me hinqué junto a la cama y aún lleno de temor pero con una excitación que ya no podía controlar toqué una de sus tetas, siempre pendiente de sus ojos, pero mi prima no hizo gesto alguno de incomodidad, apreté esa enorme teta con mi mano cada vez más fuerte y me animé a acercar mi lengua a su pezón, lo lamí rápido y esperé su reacción, pero nuevamente nada, mi prima continuaba profundamente dormida. Entonces ...
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