1. Estoy preñada pero no por mi esposo


    Fecha: 01/02/2019, Categorías: Infidelidad Autor: SWAcapulquito, Fuente: CuentoRelatos

    ... gemidos empezaron a salir de mi boca: “ahhhhh ohhhhhh ahhhhh”. Y a medida que aumentaba la fuerza de las arremetidas, mis gemidos empezaron a transformarse en pequeños grititos imposibles de contener. Me moría de placer.
    
    Estaba totalmente encorvada, arqueada contra la pared, gritando cada vez más fuerte. Por el movimiento casi hago caer una cuchara, así que mi excitación me volvió a traicionar y le dije “vamos a mi cuarto”. Salimos de la cocina, pasamos al lado del sofá donde estaba mi esposo, el cual prácticamente estaba desmayado, subimos por la escalera y lo lleve a mi cuarto. La cama donde dormía mi esposo y su sagrada mujer todas las noches, ahora era invadida por su amigo, quien se sentó en el filo de la cama y me dijo que me siente sobre él. Así lo hice, pero antes pude comprobar el tremendo tamaño de aquel pene, era simplemente hermoso, aun en la oscuridad, pude ver que tenía aproximadamente la misma longitud que la de mi esposo pero mucho más gruesa, con razón me hizo delirar en la cocina.
    
    Luego me puso en cuatro en la cama y me la metió esta vez en forma salvaje. Era salvajemente penetrada por el amigo de mi esposo, y en nuestro propio lecho. Aún no sabía cómo había llegado a eso, pero igual seguía gritando de excitación. Él se empezó a mover más rápido cada vez, era demasiado, yo gritaba como loca con tremenda estaca a cuatro patas. El me cogía la cintura mientras me taladraba y me decía lo mucho que espero por este momento. “Ayyyyyyy ayyyyyyy aghhhhh ...
    ... ohhhh sigue papi, sigueee ahhhh”. De pronto la ola de orgasmos vino a mí, increíble, no había tenido nunca esa sensación hasta pensé que multiorgasmica todo este tiempo y recién esa noche lo descubrí con el amigo de mi esposo. El siguió metiéndomela mientras yo era sacudida por esos terribles orgasmos.
    
    Luego me dio la vuelta y me puso mis piernas en sus hombros, y me la metió de golpe hasta el fondo de mi útero, y el metesaca fue tremendo, parecía que se iba a romper la cama por los movimientos y las ventanas se iban a quebrar por mis gritos (ya no me importaba mi marido que dormía abajo en el sofá).Que bestia de hombre por Dios. Luego me dijo que ya se le venía... yo le dije “ayyyy… ahh… estoy en mis díaaas mi… ahhhhh”. Él dijo: “no te voy a embarazar a ti te voy a PREÑAR”. Y los dos empezamos a movernos más rápido que nunca, y de pronto empezó a correrse dentro mío, me lleno toda la vagina de esperma, y al sentir su calor me empecé a correr (por tercera vez en la noche), sentía como chorros rápidos y muy profundos, muy calientes, yo decía “ahhhh… preñaaameee papiiitooo ayyyyy ahhhh” Y seguían los chorros de semen dentro de mi matriz, me estaba fecundando. Nunca había sentido tanta cantidad de semen en mí. Que cogida tan fantástica
    
    Luego nos quedamos abrazados y extenuados, y poco a poco volvió la conciencia en mí, me di cuenta de mi error, y ahora qué sigue? El amigo de mi esposo se separó, Muchas gotas de semen salían de mi vagina, conservando su calor, me dijo que ya ...