los complejos de mi niño - Relatos Eróticos

los complejos de mi niño

... harem. Solo horas pasaron para que no lo fuera. Merendamos como si fuese una cena fría, al extremo que a la noche no cenamos, fue solo una celebración que propuso mi madre con varios brindis que nos pusieron bastante alegres. Hasta pusimos música y bailamos, yo quería jazz antiguo y mama boleros lentos, pobre hijo se canso de refregar su pija sobre nuestras panzas, lo que nos dejo muy calentitas. Cuando nos retiramos a dormir, mama viene con nosotros, sin que la hallamos invitado, es la primera en desnudarse y acostarse, el nene y yo la contemplamos con estupor y admiración por lo bien conservada que está a pesar de su edad, totalmente depilada, suelto su rodete tiene un cabello largo lacio, precioso, sus tetas gordas tienen unos pezones el doble de grandes que los míos y bien oscuros, sus chupetes parecen dos cilindros de parados, tiene un tatuaje que ignorábamos sobre la pelvis, una flor y un corazón ambos rojos. Tomo una postura de costado y su culo un poema a pesar de las naturales estrías, bien delineado con algo de cintura que delata lo bella que ha sido de joven. Todavía lo es. El nene un poco avergonzado con su pija siempre parada apuntándole a su cara, mientras ella dice admirada, hijo te la vi gomosa y pensé que era normal, así parada es grande, el consolador perfecto, hija te felicito. Terminamos en un triple abrazo y en una noche de orgia, me pidió permiso y antes de otorgárselo se había hundido la pija del nene dentro de ella, notable el nene aguanto sin acabar y lo hizo cuando ella estallo en un orgasmo que yo prendida a sus tetas goce tanto casi como ellos. Al pobre le sacamos cinco polvos yo acabe tres veces y ella dos, una de la mamada que le propine con muchas ganas mientras mi amor me enculaba. Hoy regreso del trabajo, mientras espero a mi hijo, termino este relato, creo que a mi niño si todavía le quedan complejos es solo por desagradecido.