1. Un dia en la playa nudista


    Fecha: 15/12/2018, Categorías: Voyerismo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... la mirada y mi pene si bien no se puso erecto, creció un poco. Teiendo una erección, lógicamente tendría problemas, pero que el pene crezca un poco, no supone ningún problema,y de hecho puede ser normal que pase sin que haya excitación. Pero obviamente sí había excitación y ella se dio cuenta. Lo que me delató es que yo bajé la mirada para ver mi pene y controlar que no tuviera una erección. Ella me dijo: anda,se te ha puesto más grande. Como vi que se lo tomó como algo divertido, Le respondí: normal, mirándote. Dijo ella: vaya, así que tu vienes a la playa a ver tias en pelotas. Respondí: bueno, cuando voy a la playa, voy a ésta para no tener las marcas del bañador, y sinceramente no soy capaz de ver una tia en pelotas y quedarme igual. Ella rió:Bueno, a ti tampoco se te ve mirón. Y tienes una carita de bueno. eres un niño aún, ¿no? No tanto como parece, le respondí. ¿Ah no? ¿Cuantos años tienes? 31 respondí. Fue poco antes de cumplir los 32, antes de empezar este verano. Vaya, yo te echaba 21 me dijo. ¿Puedo preguntarte yo la edad? dije. 33 cariño. No había fallado mucho en mis cálculos. Y me dijo: pero bueno, ya que estás aquí, podrías haberle pedido que te pusiera la crema alguna mejor que yo, ¿no? Y dije: no no, tú estás muy bien. Uy, que cumplidor que eres. Sonreí. Y dije: oye, voy al chiringuito a por una cerveza. ¿Quieres tú una? Bueno, vale. Nos preguntamos los nombres. Estuvimos charlando un poco, y ella dijo: me voy a ir. Y yo: también. ¿te importa si te acompaño? ...
    ... No cariño. ¿Para dónde vas? Hacia el metro. Yo también. Los dos teníamos que ir en la misma dirección. Oye, ¿vas para casa¿ Le pregunté. Sí. ¿Y vives sola? Con una compañera, pero vendrá más tarde. Ya sabía que yo quería ir con ella. ¿Puedo venir a tu casa? Sonrió: sí cariño. Llegamos a su portal, entramos, y nos subimos al ascensor y la besé. Entramos en casa. Voy a la ducha, ¿vienes? Ya había visto su cuerpo desnudo, con lo cual no habría la agradable sorpresa que supone ver desnudo un cuerpo que antes habías visto vestido, pero desde luego mereciá la pena. Estaba en casa de una desconocida de la nudista, y la verdad es que ya echaba de menos ese imperfecto pero morboso cuerpo desnudo. Nos metimos en la ducha. Ella acarició mi sable y yo su vagina peludita. El sable creció, pero no se puso aún erecto. Ahora mis manos estaban en su traser oy las suyas masajeaban hábilmente mi sable y mis pelotas. Le chupé las tetas. Salimos de la ducha y fuimos a la cama. Ella empezó a chupármela con maestría mientras yo acariciaba su espalda y alargando un poco los brazos llegaba a su culo. Cambiamos de posición y ahora voy yo a chupar su sexo. Ella gemía suave y lubricó un poco. Yo seguía erecto, así que me puse una goma y en la posición misionero la pentré. Poco tiempo y ella se puso encima a cabalgar, y finalmente a 4 patas. Esta era la posición que más la satisfaciía. Venga, córrete, le dije, yempezó a gemir más y más ohhh ohhhhh y ambos llegamos al orgasmo ohhhhhh ohhhhhh. Descansamos ...