1. LA NENA TAMBIÉN QUIERE ESTUDIAR


    Fecha: 18/04/2024, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... ¡Dale, dale! – Saqué la lengua. Todavía no quiero hacerlo. Quiero tener los huevos llenos durante más tiempo. ¡Coger con el tiempo de mi lado, yo controlando! Para Ofelia, coger puede ser eterno, siempre, sin dudas ni etapas. 
    Pero yo no soy así. Ella todavía no lo tenía totalmente incorporado, porque durante las siestas en que venía a casa, echábamos un polvo y regresaba a su casa. Ofelia no terminaba nunca de orgasmear, pero yo acababa una sola vez, ¡y a esperar!
    
    Volví a su concha. Chupé los generosos labios externos, uno y otro, vez y vez…, y mordisqueé el clítoris, mientras Ofelia gritaba y gemía de placer, inundando mi boca de fluidos. Besé y lamí hasta dejar lo imprescindiblemente húmedo. La hermosa criatura, luego de sus palpitantes y efectivos orgasmos, se relaja abriendo las piernas, levemente recogidas, ofreciendo lo mejor de lo mejor a mi placer. 
    -¡Así, así, papito! ¡Frente al espejo! Me gusta ver cómo me la metés, como va entrando…, ¡es tan linda! Levantate un poquito, así la veo mejor… - Estábamos en un magnífico misionero. 
    Para que Ofelia vea, no me acosté sobre ella. Me apoyé en mis brazos, entrando despacito. 
    -Así mi amor. ¿Ves bien cómo te entra la pija?
    -¡Maravilloso! - Ahora sí. Me acosté sobre ella chupando sus pezones.
    Recogí mis brazos y fui a su boca. Todo, todo. Poco a poco. La intención es besar y chupar todo su cuello, sus orejas, sus ojos y mejillas… ¡Es tan hermosa!
    Ofelia todavía no tiene tetas, apenas unos conitos…, pero los ...
    ... pezones son dos dedales. ¡Ideal para chupar! Además, como me lo dice reiteradamente, la chupada de pezones la excita una enormidad. 
    -¡Ay papito! ¡Cómo quisiera tener las tetas de Sole o Sofi! ¡Nada más que para que vos me las chupes!
    -¡Ya las tendrás, mi amor…, y mejor todavía… ¡estoy seguro!
    No necesito moverme. Ofelia agiliza sus caderas…, arriba, abajo…  
    -Más, más, más adentro. ¡Ay Dios! ¡Quisiera que me llegaras a la garganta, pero desde adentro… ¡jajaja!
    -¡Mi nena preciosa!
    -¿Si? ¡Lo soy, lo soy! ¡Tú nena preciosa! ¡Eso quiero! ¡Ser tu nena preciosa! No soy celosa papito…, pero quiero ser tu nena por siempre, siempre…, para que me la metás siempre, todos los días… ¡en todo momento!
    Me abraza con las piernas y nuestras lenguas se enroscan en hirviente lujuria. ¡Y pensar que seis meses atrás no había cogido con nadie! ¡Ahora es una diosa del sexo!
    Así estábamos: concha apretada y húmeda; pija ardiente y palpitante.
    -¡Papito! ¡Qué lindo es cuándo te tiembla dentro…!
    Bombeé durante un buen rato, hasta su nuevo orgasmo.
    -Date vuelta mi amor. - Le puse un par de almohadas bajo el vientre. Y se la enterré nuevamente en la inundada concha.
    -¡Dani, mi amor! ¡Qué lindo es sentir tu pija en toda forma! ¡Arriba, abajo! ¡Siempre adentro! ¡Tan rico!
    Se la saqué y me acomodé sobre ella, con el glande a la entrada del culo. Pasé las manos bajo su torso, apretando los pezones y empujé. La fui metiendo despacito. Ofelia acomodaba el culo en la medida del placer.
    -Mi amor…, tu ...
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