1. Mi enorme primera vez


    Fecha: 11/04/2024, Categorías: Sexo Oral Autor: Lady S, Fuente: CuentoRelatos

    ... los puse después. Pero por lo demás, era todo, media “darks” con lentes que podía reflejar señales satelitales, etc. Tímida y bastante asquerosa «entiéndase como poco sociable», pero supongo que algo les atraía de mí.
    
    Quiero también aclarar que las mujeres «y perdón si generalizo», siempre tenemos oportunidades distintas, sobre todo cuando estamos en relación con alguien, es como que somos el “plato prohibido”, así que es notable que cuando terminamos una relación, activemos las redes sociales. Lo que muchos confunden, es que lo hacemos inmediatamente para tener sexo «y quizás en varios casos es así», pero no en todos; la mayoría solo es para socializar y pasar el rato. Bueno, en el mío… fue para ambas, quería charlar sí, pero también… experimentar nuevos horizontes.
    
    No con cualquiera ni con quien sea, pero era muy nueva en el mundo sexual y mi anterior chico me había mostrado solo la punta del… iceberg. Así que obviamente mi cuerpito a penas desarrollado me exigía sentir mucho más. A mí siempre me gustó bastante el hombre inteligente, serio (pero gracioso) y muy varonil.
    
    Comenzamos a hablar luego de que me dijo algunas cosas sobre una historia que había subido a Instagram, y por chat teníamos una química hermosa «muy genial la verdad» me hacía reír mucho y por fotos me atraía, obviamente lo stalkee de arriba a abajo. No voy a especificar rasgos para no definirme en un estereotipo, pero tenía muchas cosas que me gustaban.
    
    Cuestión que decidimos vernos después ...
    ... de unos quince días de puro chateo, llamadas (no video llamadas) y claramente, nada de nudes. Lo que me gustó bastante porque es habitual que los hombres, luego de un tiempo comiencen a demostrar esta tendencia por enseñar su cuerpo, aún si este no tiene nada para destacar.
    
    Nos encontramos en el centro de mi ciudad, fuimos a un lugarcito y pedimos un milkshake «de mis preferidos». Yo estaba vestida con botitas negras, medias de red finas con un short de jean que estaba a la altura de mis muslos, con una blusa oscura y una campera de bengalina entallada que dejaba al descubierto mi extra delgada cintura con un piercing en el ombligo. Con el cabello suelto y lacio color rubio, que me llegaba hasta poco más de los hombros.
    
    Y él estaba vestido con una camisa y un suéter entallado, con un jean azul oscuro y zapatillas urbanas casuales. Peinado lo que era la moda en ese momento entre hombres. Con una ligera barba muy bien cuidada, parecía que se la había dibujado con algún lápiz que escupiera pelos. Tenía dos anillos en las manos y un reloj oscuro, «su outfit parecía como de hombre de 30» a pesar de que tenía 21 años, sin embargo, me encantaba como le quedaba.
    
    Obvio, no se lo dije ni lo demostré, pero sí me agrado que parecía muy pulcro y ordenado «algo que adoro en los hombres, por cierto». Nos sentamos a charlar de «ya saben, varias cosas equis», pero noté que estaba algo incómodo, como si estuviera “nervioso” así que le pregunté si pasaba algo, y me dijo que estaba ...
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