Chantaje a mi puta perra (X) - Relatos Eróticos

Chantaje a mi puta perra (X)

... Me miro, pero no dijo nada, solo se fue al probador. Cogí un par de faldas y de vestidos y me dirigí hasta alli. Se había quedado en bragas, horribles, por cierto, sujetador y pantys, y siguiendo con lo que me había propuesto a riesgo de estar equivocada y de que se liara, pero no pensaba con la cabeza, porque yo tenía el coño chorreando, hasta me mire varias veces, por si se notaba la mancha en el pantalón de mi traje, ¡te he dicho que te desnudes! Y cuando esperaba lo peor, simplemente se descalzo, se quitó los pantys, las bragas y el sujetador. Esa fue la señal. Y desnuda gana mucho, ademas de que estaba depilada. Metí mis dedos en su coño, también era mi primera vez, y estaba chorreando. ¿Estas cachonda? “Si Ama”, cuando dijo esto casi que me corro alli mismo Señor. Le saqué los dedos del coño y se los metí en la boca, no tuve que decirle nada, se puso a lamerlos y chuparlos. Me separe de ella y le ordene más bien le grite que me desnudara, ese fue su único momento de duda Señor, porque fue a decir algo, pero le solté un bofetón, aún más fuerte que el que en su día le di a mi sobrina, y yo estaba sorprendida Señor, porque me salía natural, porque no era nada premeditado. Pero fue mano de santo, porque, aunque la manos le temblaban, me desnudo, aunque se le escapo una sonrisa al bajarme los pantalones y ver mi tanga hecho puro agua. Para bajarme los pantalones se tuvo que poner de rodillas, y aproveche para cogiéndola del pelo, pegarle su boca al coño. Y entre que yo ...

... estaba muy caliente y que ella tenía experiencia, no tarde ni dos segundos en correrme en su boca, pero la muy perra, siguió y en un momento dado, vi que como había leído alguna vez, ella había llevado sus manos a la espalda. Me calentó aún más porque casi la asfixio pegando su boca a mi coño. No tarde en volver a correrme, y me tuve que sentar en una butaca, porque si no me hubiese caído, porque se le notaba experiencia, como sumisa y sobre todo comiendo coños.

Voy a relatar la conversación que mantuvieron, más o menos como nos contó Jara, y unos días más tarde me ratifico personalmente Ana.

Jara. -Ufff, no es tú primera vez, casi me haces caer, si te digo la verdad, haces unas semanas, no se me hubiese pasado por la cabeza hacer lo que he hecho.

-Ana. -Ni yo lo esperaba, pero siempre que me has atendido veía como hacías lo que querías conmigo, y más de una vez no he sido capaz de decirte que no me gustaba lo que me vendías, pero me parecía más una orden que una sugerencia.

-Jara. - ¿Y desde cuando eres sumisa?, porque yo no tengo experiencia, aunque si tengo sumisa, y a través de ella es cuando he descubierto la Dominación

-Ana. -Desde hace muchos años Señora, (oír eso fue mojarme entera otra vez), pero jamás aquí, siempre ha sido o en Madrid u otras ciudades, y por desgracia siempre era pagando, siempre contratando a una Ama, nunca me he querido arriesgar a que me conozcan, y menos a que supiesen de donde era y quien soy.

-Jara. -Podías haberme rechazado, ...