Chantaje a mi puta perra (X) - Relatos Eróticos

Chantaje a mi puta perra (X)

... mí.

-Continua tetona…

-Jara. -Siempre he sido, lo reconozco, como dice mi hermana, manipuladora, me gusta hacer y deshacer a mi antojo, por eso me case con el cornudo de mi marido, porque no vale nada, y solo se limita a hacer lo que yo diga, de hecho él no sabe lo de su sobrina, pero si lo de mi “mujer”, y de alguno más, y que quede claro hasta el día que descubrí lo de mi sobrina, jamás le había puesto los cuernos, pero descubrí mi vena Dominante y desde ese día empecé a leer sobre eso, y jamás me había masturbado tanto, y todo eso hizo que me plantease el divorcio, y por eso planifique todo lo de la tienda, porque no estaba dispuesta a dejarle nada al picha floja del cornudo de mi marido, él tiene su trabajo, y no es un mal trabajo, aunque no gana mucho, pero se acomodó y le gusta o mejor dicho le gustaba gastar más de la cuenta, dándose a la buena vida.

-Ahora sigues tetona, ¿pero para que te vas a divorciar?, por lo que dices acepta todo, incluso que tengas amantes, debes de aprovechar eso, puedes convertirlo en cornudo y en tu puta.

-Jara. -Pues no lo había pensado Señor, pero lo podría intentar…

En ese momento decidí cuando lo iba a intentar, pero me callé…

- ¿Y has tenido alguna experiencia como Domina?, quitando lo de tu sobrina.

-Jara. -Con sumisos no, solo he follado por follar con dos, pero siempre llevando yo la voz cantante, pero con Ana si, con ella ejerzo de Domina en todo momento, con ella experimento mucho.

-Cuéntanos como fue lo de ...

... Ana.

-Jara. -Ella es cliente nuestra casi desde el primer día, no es guapa ni tiene buen cuerpo, tampoco malo, pero esta gordita y no es muy alta, aunque es una persona influyente por su puesto y cargo político, siempre ha estado sola, me refiero a que nunca ha tenido pareja, aunque cuando la descubrí entendí el porqué. Ella venia con bastante asiduidad a la tienda, y siempre aceptaba todo lo que yo le decía respecto a la ropa, he de decir que más de una vez le he colocado algún vestido que otro que no tenía salida, y conforme más leía sobre la Dominación más volaba mi imaginación, y fantaseaba con las clientas, mientras las atendía, hasta que un día que yo estaba deseando quedarme a solas con Mimi, porque estaba muy salida, entro en la tienda, y en ese momento se me vino a la cabeza lo fácil que era venderle lo que yo quisiese, y que siempre aceptaba, y esto a lo mejor era imaginación mía, pero me pareció recordar que siempre bajaba la mirada, ante mí, pero con mi hermana no, cuando es bien conocida también por la mala leche que gasta en su partido. Y todo se dio rodado, porque llego como siempre a la hora de cerrar, y me salió, les dije que se fueran, aunque a Mimi le extraño, porque ya le había dicho que quería sentir su boca en el coño, pero no dijo nada y se marchó. A Ana tampoco le extraño, porque no era la primera vez que se quedaba a solas con Lu o conmigo.

Y jugándomela, solo le dije vete al probador y desnúdate, que ahora voy yo con la ropa que te vas a llevar. ...