1. Irma, mi dulce niña


    Fecha: 29/02/2024, Categorías: Hetero Autor: eedwon, Fuente: CuentoRelatos

    ... cuchicheaban entre ustedes, ¿acaso me estaban criticando?
    
    - Para nada, solo me decían lo bien que te veías y sobre todo que hacíamos bonita pareja.
    
    - ¿En serio?, eso me halaga.
    
    - Bueno, creo que ya descansé lo suficiente. ¿Me acompañas a las regaderas?
    
    - Me parece perfecto.
    
    Así, fue que nos paramos y comenzamos a caminar en dirección a las regaderas del gimnasio. Estábamos a punto de llegar a la entrada cuando ella se detuvo en seco.
    
    - Espera- me dijo- escuché los pasos de alguien.
    
    Para nuestra sorpresa se trataba del molesto compañerito, iba en dirección al gimnasio así que a Irma se le ocurrió algo como para dejar bien en claro la situación.
    
    - Ven – me llevó de la mano a una parte del gimnasio donde se veía perfectamente la entrada, esto con la intención de que nos viera el tipo ese.
    
    - En cuanto él entre me besas- me pidió Irma.
    
    Yo ni tarde ni perezoso, no esperé, en cuanto terminó de pedirlo, comencé a besar a Irma de forma desenfrenada, si ella quería cerrar el asunto por completo tenía que ser de una forma fulminante. Primero comencé con besos, después con caricias por todo su cuerpo, recorriendo sus piernas, después su cintura, entreteniéndome más con su culito. La pegaba a mi cuerpo para que sintiera en todo su esplendor mi pene erecto. Así estábamos en el fogueo cuando escuchamos un ruido, era el compañerito que al ver la escena se quedó parado y al verse sorprendido hizo ruido con una botella que llevaba en la mano, siendo así se dio ...
    ... la media vuelta y se retiró del gimnasio. Nosotros dejamos que pasara un momento para después mirar hacia la entrada de la escuela donde pudimos ver que el tipo se iba.
    
    - Tonto – Irma me dio un pequeño golpe en mi brazo.
    
    - Oye, ¿por qué me pegas?, yo solo hice lo que me pediste.
    
    - Sí, pero te pasaste un poco de la raya, mira que ofrecerle esa escenita.
    
    - Pero si bien que estabas a gusto, ¿no es así?
    
    - Sí, pero…
    
    - Pero qué- no la dejé terminar.
    
    - Ash… nada más porque estaba sintiendo rico te dejé seguir- Cogió mi mano derecha y la introdujo dentro de su lycra, haciendo que palpara su panochita ya húmeda- ¿ves?
    
    En efecto, ya se estaba mojando. Se podía sentir la humedad a través de su tanga.
    
    -Ven, necesito que termines lo que empezaste- dijo ella.
    
    Nos fuimos rápido a las regaderas, donde tan solo entrar dejé su maleta en una banca, para después ella hacer que me sentara en la misma. Irma abrió sus piernas y se acomodó frente a mí sobre las mías y comenzamos a besarnos. Después le quité su blusa y saqué su brasier, quedando ante mí sus pequeños pechos, por lo que empecé a saborear sus pezones, los mordía, pellizcaba, estrujaba, besaba su cuello, saboreada lo salado de su cuerpo, todo esto mientras que ambos hacíamos movimientos para sentir miembros por sobre la ropa, paramos por un momento para quitarnos por completo la ropa y así los dos quedamos sin nada que nos estorbara, podía la panochita brillante de Irma, sin ningún rastro de vello púbico, lo ...
«1...3456»