1. Pendejita trola


    Fecha: 02/08/2017, Categorías: Hetero Autor: ámbar coneja, Fuente: CuentoRelatos

    Estábamos de joda en la casa de Lucho, una noche de verano, más al pedo que una monja en un bulo, aunque planeando nuestro viaje de egresados a 10 días del mismo. Éramos el Guille, Maxi, él y yo. Al principio unos mates y la play a full. Después unas patis con birra bien fría entre rock nacional, truco, cigarrillos, chistes y boludeces acerca de nuestras novias. Maxi era el único que todavía no la ponía, y eso le daba el título del más pajero del grupo. Tanto que usaba las horas de historia para leer porno con Lucía, la traga leche del aula.
    
    Pronto todo lo que se decía era absolutamente irrelevante, cuando Lucho dijo que no daba más de sueño, pero que nosotros la sigamos, siempre que luego ordenemos un poco, y se fue a dormir.
    
    Ya eran las 3 cuando Nati llegó media borracha de la calle, justo en el momento en que yo preparaba una sangría. Nati es la hermana de Lucho, y es una seductora pendeja que está que se parte por donde la mires. No venía bien de cola pero portaba unas tetas que rajaban la tierra, una voz trasnochada aunque muy calentona, una cinturita sexy, una boca chiquita con pinta de ser excelente mamadora y unos ojos azules de gata perversa. Igual, ninguno pensó en cogérsela. No solo porque Lucho nos desfiguraría a trompadas. Todos hablaban de ella en el colegio, y no queríamos bardo con nuestras novias por culpa de su reputación.
    
    La piba se quedó con nosotros, empinando botellas y hablando de todo, hasta de fútbol. Incluso sabía una bocha de bandas de ...
    ... rock. Pero no podíamos creer que luego nos contara como al pasar que recién llegaba de lo de una amiga, donde se armó una tremenda orgía entre dos minas y cinco vagos, y que terminó muy quenchi porque solo podía mirar. No participó porque perdió una apuesta.
    
    Nos re calentaba escucharla relatarnos cada jugada, cada palabra que decía o gesto que hacía, cuando Maxi interrumpió con una de sus ideas:
    
    ¡¿y si te enfiestás con nosotros guachita?!
    
    Ella nos miró abriendo exageradamente las piernas y dijo que sí con la cabeza sacando la lengua
    
    Mientras explicaba que una de sus amigas tuvo su primer doble penetración por la concha, y que la otra se tragaba toda la leche de todos, los tres le relojeábamos su bombachita roja y mojada, dado que tenía una pollerita muy cortita, un top sin corpiño y un hambre de guerra que le evaporaba la claridad y nos hacía salir de nuestras pieles.
    
    Ella se sacó el top, los tacos y la pollera con una velocidad asombrosa, se puso a bailarnos con la gracia de una cabaretera de oficio aunque demostrando poco equilibrio mordiendo sus labios, apenas rozando sus lolas con las yemas de sus dedos, meneando las caderas con la sensualidad del mar y suspirando bajito.
    
    ¡¿assí de fácil sos nenita?!, le largó sin procesarlo el Guille, que había olvidado su malhumor por no tener más puchos.
    
    ¡que sea la hermanita de Lucho no significa que tenga bigotes, o una pija parada!, replicó Nati cambiando su sonrisa erótica por una un tanto más siniestra. Después ...
«1234...»