1. Tía y sobrina


    Fecha: 21/10/2023, Categorías: Anal Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... con ella, dijo Majo.
    
    Me quede un rato más, solo. Y después de aburrirme, decidí volver a la cabaña. Las chicas estaban encerradas en uno de los dormitorios, así que aproveche para darme una ducha y cambiarme. Sobre la mesa del comedor había una bandeja de fiambres y quesos, seguro seria la cena. Me tire, en toalla, sobre el sillón a mirar la tele.
    
    Escuche que Majo me llamaba. Entre al dormitorio, se notaba que Barbie había llorado y que Majo también. “esta todo bien”, me dijo mi chica. “podes ir a dar una vuelta, y volver en una hora?”.
    
    Ok, me cambie y sali sin rumbo fijo. Termine tomando un café, en el centro comercial cercano. Había pasado algo mas de una hora, cuando Majo me envió un mensaje “venite”. Pague y sali.
    
    Llegué, fui directo a la cabaña. La puerta de nuestro dormitorio estaba abierta y entre.
    
    Estaban las dos acostadas, sobre las sabanas, vestidas para matar. Majo tenia un bodi negro, que resaltaban sus tetas, apenas cubría su vulva, y por detrás la tela se perdía en medio de ese culo goloso y redondo. En cambio, Barb era diferente. De color blanco, angelical,un corpiño de encaje y una tanga, que terminaba en un moño sobre su culo. Eran Dios y el diablo juntos, cada una por separado.
    
    Ambas se pararon, vinieron hacia mi y me fueron quitando la ropa. Cuando llegaron al bóxer, Barb se sentó en una silla y Majo continuo.
    
    Mordió mi pija sobre la tela, mi cabeza ya había mojado algo, y al descubrirla, con mucha delicadeza, metía mi glande en su ...
    ... boca, limpiando con la lengua cada gota que iba saliendo. Yo traía “la carga completa”, todo el día habían jugado con mis huevos y pija, que ya no daba más.
    
    Se arrodillo y comenzó a mamar, muy despacio. Por momentos la miraba a Barb, que había metido su mano en su tanga. Iba y venia por mi tronco, llegando a la bolsa de huevos, metiéndose de a uno por vez en la boca. Majo se paró, y compartió mis jugos, dándome un beso. “veni”, le dijo a Barb. La nena se acercó.
    
    Mi chica se coloco a mi espalada, Barb de frente a mí. Su cuerpo menudo, parecía que temblaba como una hoja. La bese en los labios, con mucha delicadeza y amor. Ella quedo con sus ojos cerrados y su boca carnosa, apenas abierta. Abrió los ojos. Me devolvió el beso, esta vez metió parte de su lengua dentro mío. Majo por detrás, no dejaba de masturbarme, muy despacio, casi sin notarlo.
    
    Gire a Barb, para poder desabrochar su corpiño. Besaba su cuello, el comienzo de su espalda, me agaché para tomar su tanga, de ambos lados, y la fui bajando, mientras observaba esa cola hermosa que tenía. Me pare, la puse de frente a mí. La volví a besar, y sentí esas tetas duras, con sus pezones hirviendo, sobre mi pecho. Majo le tomo una mano, y la puso sobre mi verga, que ya pedía fiesta.
    
    Fue como un shock eléctrico. Barb solo la acariciaba con los dedos, yendo desde el tronco hasta la cabeza. “sentate”, le pedí.
    
    Ambas se sentaron en la cama. Me acerqué, y puse mi pija a la altura de su boca. Barb me miro a los ojos, bajo la ...