1. ÉL 13 y yo casi 18 en su primera vez.


    Fecha: 11/09/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... dijo que nos estaba muy seguro porque sabía que eso dolería, y yo le dije que no tuviera miedo, será muy gentil y si él no quería nos detendríamos. En la mochila que llevaba saque lubricante y unos condones pues quería hacerlo sentir seguro, me senté en su cama y le pedí que se parara enfrente de mí, entonces le dije que si podía desvestirse. Con una mueca entre risa y miedo acepto muy tiernamente, se quito la camisa azul que llevaba; pude ver su torso, su pecho, su delicioso cuerpo de niño adolescente. Mi respiración ya estaba agitada, mi verga estaba tan dura que me costaba trabajo mantenerla en mi pantalón, el solo hecho de ver el elástico rojo de sus calzoncillos me prendió como nunca, entonces se quitó el cinturón, tomo sus jeans para comenzar a quitárselos y yo no podía creerlo, ese niño hermoso, sexi y sumamente guapo estaba desvistiéndose enfrente de mí. Cuando sus pantalones estaban por fin en el suelo y lo miré casi desnudo pude notar su erección tratando de salir de esos calzoncillos. Nerviosamente trataba de taparla con sus manos, pero me pare junto a él t comencé a besarlo una vez más, lo derrumbe en la cama con todo mi peso, me quite la camisa y me dirigí a su cuello, lo devoraba con desdén mientras sentía su pequeño cuerpo debajo del mío. Me baje los pantalones con todo y bóxer y tome una de sus piernas, eran perfectas blancas y suaves, con algo de bello apenas creciendo. Comencé a besarlas hasta casi llegar a su ingle y con cada beso Víctor vibraba de ...
    ... placer. No podía aguantar más así que le bajé su ropa interior y de un salto pude ver su verga adolescente, de unos 13 cm (que obviamente representaba su edad). Sin pensarlo la metí en mi boca y comencé a chuparla, es raro decirlo, pero su sabor era el de un niño con unos bellos poblado la zona de sus testículos. Unos minutos después sentí como sus arcadas anunciaban su eyaculación, así que me detuve y le dije que comenzaría. Lo puse boca abajo y obtuve la vista más gloriosa que pude imaginar, sus perfectas nalgas paraditas y rosadas, las abrí y me dispuse saborear su rosado ano por completo. Cada lengüetazo hacia que gimiera profundamente, le metía la lengua casi hasta la mitad, mordía y nalgueaba ese perfecto trasero de niño. Entonces comencé a meterle un dedo, tomé algo de lubricante y seguí con dos. Cuando supe que era hora mi verga escurría de precum, palpitaba y me dolían los testículos solo de pensar lo que venía. Subí hasta su espalada y le dije que sin estaba listo para ser penetrado y me dijo que sí. El escuchar su voz en ese momento aceptando mi ser dentro del suyo me hizo perder la razón y tomé lo más rápido posible un condón, me lo puse y también algo de lubricante, y por fin comencé acercando a punta de, i verga a su ano, sentir ese calor me enloqueció y lo metí aún más mientras Víctor gemía un poco de dolor. Cuando iba a la mitad ya estaba muy acelerado queriendo entrar por completo en sus cavidades, pero en ese momento Víctor me pidió que parara deteniéndome con su ...