1. Mi empleada me enamora y hacemos el amor


    Fecha: 13/09/2022, Categorías: Lesbianas Tus Relatos Autor: Mary, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... me sacaba el pantalón y mi calzón, levante un poco mis nalgas, ella se sentí encima y vi como se sacaba la ropa rápidamente desesperada, ya desnuda se recostó encima mío y comenzó a frotarse sobre mi, yo me di cuenta que disfrutaba algo nuevo y que no era necesario un pene para llegar al orgasmo, llegó hasta mi vagina y comenzó a besarlo, luego pasa a su lengua por mi clitoris hasta meterlo dentro de mi concha, fue ahí que no resistí y dije fabianita linda quiero ser tu mujer te quiero hazme el amor, mis piernas se tensaron y sentí un gran orgasmo, ella chupaba mi clutoris cosa que me volvía loca, luego sentí como sus dedos entraban en mi vagina que estaba muy mojada, iba entrando de uno en uno, luego más, hasta que sentí su pequeña mano que quería invadir mi coñito, lleve mi mano y toque la de ella, habían entrado todos sus dedos, pero falta a que entre el resto de mano, mi excitación era inmensa, y dije mételo un poco más por favor fabianita,, ella empujaba, hasta que sentí que me abrió logro entrar la mano, grite y cogí su mano había entrado toda y ella la movía adentro, me volvía loca, por favor fabianita me matas, y ella lo movía lentamente, sentí que iba cediendo ya que ella lo iba sacando un poco y volviendo a meter no aguante y sentí que me orinaba, nunca había sentido tal cosa ni con mi esposo ni con mis amantes, me volví loca y le dije ahora sí me fregaste fabianita linda, le gusta delito dijo, si quiere más, ya no le dije, pero yo todavía no he terminado yo ...
    ... también quiero delito, en eso sentí como me iba saliendo de mi colo ese gran tronco que me hacía feliz como nunca, ahora fui yo la que tome la decisión y la llene de besos en la boca, diciendo gracias mi amor luego empecé a chupar sus pezones y a morder los casi no salían y tenía que hacerlos crecer, luego baje a su concha tenía unos cuantos bellos pequeños, sus labios estaban duros comencé a morder los y fui hasta su clitoris, mi sorpresa era que estaba crecido tenía el grosor de mi dedo meñique, pero era pequeño como de un centímetro de largo o algo más, estaba durito como un pene pequeño lleve mi lengua al centro de su vagina y mi sorpresa fue mayor, mi lengua chica a con algo que no dejaba que se introduzca, en eso pensé está virgen, mi dedo índice rico su himen y sentí que ella se movía para introducirla, y le dije cuántas libras te han metido fabianita, ninguna señito contesto, quieres que te meta la mano le dije, si por favor señito dijo, sentí nueva ente una arrechera inmensa ahora yo iba a ser el hombre y a romper el himen de una virgen, yo sabía que no tenía que hacerla doler para que no se lo quite las ganas, al introducir mi dedo sentí como algo sus e se deslizó , lo que me hizo acercar mis otros dedos, suavemente iba introduciendo uno a uno, estaba inmensa ente ajustado, ella se quejaba y levantaba las piernas como quien dice más, le pregunté te duele y dijo poquitito,, hasta que logré meter solo tres dedos muy ajustado y se tía sus latidos de su concha y como ajustaba ...