1. Mi primer encuentro con Pirata


    Fecha: 10/07/2018, Categorías: Sexo con Maduras Primera Vez Tabú Autor: malebens, Fuente: xHamster

    Ese verano mi vecina Carolina me había pedido como favor, si podía cuidar y alimentar a su perro mientras ella se iba de vacaciones.Acepté sin problema. Pirata era un lindo ejemplar de Doberman y él me conocía bien. A pesar de que era un bicho enorme, realmente no me provocaba tenerle miedo. Parecía tener un carácter muy tranquilo…Justo en esos días yo había comenzado a experimentar algunos cambios hormonales. Mis tetas estaban más grandes que nunca y habían comenzado a producir leche.La segunda noche luego de la partida de mis vecinos, había tenido un día largo y muy agotador. Mi novia se había desmayado en la cama, lo cual me dejó un poco decepcionada; ya que, a pesar del cansancio, justo esa noche yo tenía muchas, muchas ganas de coger con ella…De pronto, recordé que no había alimentado a Pirata. Estaba cansada, pero tenía que hacerlo. Ya estaba en bolas, a punto de meterme a la cama; pero me puse una robe corta de algodón y así salí a la calle.Estaba oscuro y apenas debía caminar unos pasos hasta la casa al lado.Entré por la puerta del frente y me dirigí directamente al jardín del fondo, a revisar los cuencos de agua y comida.Me incliné y de repente sentí una nariz húmeda tocar mi trasero, moviéndose entre mis muslos. Mi robe se había subido por mis caderas, exponiendo mis nalgas desnudas.Allí estaba Pirata, oliendo y luego lamiéndome.Me sorprendí, pero en ese momento no me enderecé. El perro estaba ahora lamiendo mis labios vaginales y yo cerré mis ojos, pensando que ...
    ... realmente se sentía muy bien…Pero de repente regresé a lo lógico y pensé que aquello estaba mal…Me levanté y empujé su cabeza hacia atrás. Debo haber estado expidiendo alguna esencia que a él le excitaba, porque trató nuevamente de regresar a mi concha desnuda…Cuando estaba regresando al interior de la casa, mi pie tropezó en un pequeño hoyo del jardín y caí de bruces al pasto, sobre mis manos y rodillas. Mi robe se levantó otra vez, exponiendo mi trasero desnudo…Estaba recuperando mi aliento para levantarme, cuando sentí la lengua de ese ejemplar enorme lamiendo mis labios vaginales depilados. Los estaba abriendo, tratando de entrar más profundo. Su rugosa lengua estaba rozando mi clítoris, que ya se estaba hinchando…Supe que tenía que levantarme y escapar, pero titubeé en hacerlo…Estaba perdida en mis pensamientos más sucios, cuando él se detuvo. Creí que había terminado y entonces traté de levantarme.Pero entonces, de repente, sentí todo el peso de su cuerpo aterrizando sobre mi espalda, haciéndome caer otra vez sobre el pasto. Pirata estaba ahora montado sobre mi espalda, con sus patas delanteras abrazando mi cintura.Apenas podía soportar su peso con mis brazos, entonces no pude empujarlo para que se saliera de encima. Entonces lo sentí…Su enorme, chorreante y caliente verga estaba golpeando entre mis muslos. Pirata estaba tratando de montarme. Ese hermoso ejemplar de Doberman estaba tratando de cogerme como si yo fuera una perra…Entré en pánico y pensé en gritar para pedir ...
«123»