1. Maduro vs jovencita


    Fecha: 16/01/2022, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Rubén, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Es muy guapa la joven, estaba acompañada de otra jovencita. Calculo que de la misma edad. Yo en mi mente me la imaginaba culiandomela, la desvestia en mi mente y con la mirada. Una chica como no la había tenido, de piel muy blanca, cabellos castaños  rubios, ojos color miel, boquita rojita.
    Por días fuí a la panadería y solo la veía, ella hablaba muy bajo con su amiga y se reían.
    Una noche tomé la iniciativa y le hablé, conversamos un poco, y su amiga solo nos veía. Ahí supe un poco de ella y que vivía en un complejo de apartamentos a lado del mío.
    Me ofrecí llevarla en mi carro y las dejé allá.
    En la noche en mi cama estaba contento. Había empezado a darme cuenta que sólo verla me alegraba, que esperaba con ansias la hora de ir por el pan.
    Y así pasaron semanas, hablaba más con ella, y su amiga.
    Y me atreví a invitarla a salir, me dijo que sus padres no la dejan salir sola. Que solamente puede salir con su amiga Rebeca, ese detalle no me iba a echar perder mi oportunidad, y le dije a Rebeca que ella también podía venir.
    Ese día fuimos a un malecón, hay sillas distante de otras y nos sentamos en una a conversar mientras Rebeca se daba una vuelta.
    Derrepente me acerco a ella y la beso suavemente, ella para mí sorpresa me corresponde, nos besamos largo rato. Yo quería tocarla, desvestirala, me contuve con mucho esfuerzo.
    Esa noche solo fue besos y nada más.
    Y así empezamos a salir, ella con la excusa que saldría con Rebeca, y nos íbamos los tres.
    Hasta una dia que ...
    ... la invité y le dije a Rebeca que la dejaría en el mall y después la buscaría, le di dinero y así fue.
    Me llevé a mi chica a un motel, apagué el carro y la bajé, nos empezamos a besar y entramos al cuarto. Que distinta a Gaby, yo esperaba que ella fuera la dominante como Gaby pero era mas calmada, la empezé a desnudar, sus tetas blanquitas, de rosadas areolas, saltaron de su bra, firmes y duritas, empezé a mamarlas, recorrí con mi luega sus tetas y subía por el cuello y volvía a bajar a sus tetas, luego por su ombligo hasta ir bajando poco a poco su panti.
    Al quitárselo veo un hermoso coño, perfecto como ninguno que he visto jamás, de color Rosita muy suave. Separo sus labios y le hundo la lengua, pruebo su coño, y es muy rico, me quedo mamando su coño un largo rato y la acuesto en la cama, la vuelvo a besar y me pongo un condon, le pongo saliva a su coño y cuando estoy por meter la ponga, ella me dice, soy virgen.
    Le dije que no se preocupara que yo no le haría daño.
    Me sorprendió mucho, tomé la verga y empezé a estrujarla en su clitoris  y veía como ella se retorcía, y lentamente de poco en poco se la fui metiendo, hasta metersela toda. Y se la dejé a dentro.
    Y fui sacándola y metiéndole lentamente pero no duré mucho y me vine.
    Esta vez solo demoramos hora y media, su coñito estaba muy rojo y le dolía. Le dije que después lo intentariamos que poco a poco se iría acostumbrando.
    Esa noche tenía ganas de coño y no me quedó más que buscar el de mi esposa, ella me dejó ...
«123»