1. Mi amigo me hizo el amor tras su cumple


    Fecha: 04/07/2018, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Estela Barilla, Fuente: CuentoRelatos

    Hola preciosuras. Hoy les cuento la noche inolvidable que pasé anoche en el cumpleaños de mi amigo, que justo el sábado cumplía y lo festejaba en su casa. Copado conmigo, me invitó a la cena. Y yo, que tengo unas ganas bárbaras de que me la dé, ni lo pensé y me puse espectacular ropa de cuero negra, tacos altos, muy maquillada y perfumada, cremita para las manos y una finísima cartera de cuero haciendo juego. Por supuesto una ropa interior bien infartante, con portaligas y todo.
    
    Llevé dos docenas de sándwiches de miga para una picada con queso, fiambre y saladitos. Llegué, entré y cuando me vio se deslumbró. Y ni hablar cuando lo besé suavecito y lo saludé, se excitó con mi aroma a perfume y pintura de labios, más mi ropita de cuero. Bueno, charlamos, comimos bien, tomamos, la pasamos bárbaro junto a otra gente invitada suya. Él charlaba animado con otras mujeres, muy bien vestido con saco y pantalón negro, zapatos y riquísimo perfume, mientras comía un sándwich de jamón crudo y queso. Pero me miraba cada tanto, y yo veía que me seguía y no me sacaba la vista. Pensé que estaría enamorado de mí, soltero que es, pero él sabe que estoy casada, si bien fui sola. Pero igual no presté atención y seguí disfrutando la cena y el cumple, que terminó pasadas las 4 de la mañana.
    
    Cuando los invitados se fueron, nos quedamos solos. Y me confesó que estaba excitadísimo conmigo y que si podía tener sexo. Y como yo también ...
    ... quería loca sentir su pene y recibir lo suyo, acepté rapidísima. Pero no hizo falta ir a un hotel: fuimos a su habitación, nos besamos, nos mimamos, nos calentamos y él me pidió que lo estimulara porque le costaba la erección con lo de sus pastillas. Ni lerda ni perezosa, le dije sí mimosa y me fui sacando la ropita de cuero negra y los tacos, él me desabrochó la blusa y cuando me vio la ropa interior casi me come cruda. Lo frené para sacarle su ropa, y cuando estuvo en calzón y le vi el pene listo, le saqué el calzón, me quité suavecito y provocativa las medias negras, las ligas, el corpiño y finalmente, la bombacha negra súper erótica. Y lo estimulé magistralmente al punto que rindió de primera. Se me acostó, me penetró por la vagina y me dio con furia y locura hasta acabar terrible semen en mi vagina. Después me dio por la cola, vagina y cola, me bañó de semen la cara, pelo, manos, tetas (que me exprimió como limones) y lo excité tanto que hasta lo hice pajearse, lo cual hizo con ganas y de su salchichón de 25 cm largó semen hasta por las bolas, el que tragué con gusto y luego le pasé la lengüita. Le di mi flujo, me masturbé sobre él y luego me pidió más, excitado con el cuero, mi pintura y los sandwichitos. Me abrí en cuatro, lo estimulé con una cosita de mi cartera y me la dio seis veces más. Y pasé una noche imborrable, cumpliendo mi sueño de ser violada por mi amigo, ése de quien siempre soñé con el sexo. 
«1»