Mi nueva vida, un paso hacia los placeres capitulo 1 - Relatos Eróticos

Mi nueva vida, un paso hacia los placeres capitulo 1

Me llamo José, tengo más de 30, hace ya un par de años salí de mi ciudad natal y me dirigí aquí a la capital, mi intención era buscar un buen empleo y bueno tener nuevas experiencias, la ciudad de dónde vengo, no es muy grande y mucho menos hay lugares para jóvenes, tome la decisión y bueno llegué.
Mi madre me dió el contacto de su prima hermana Anny, me dijo que era una mujer algo gorda solterona de más de 50 y que vivía sola aquí en la ciudad, que era una persona muy cariñosa y amable, pero también era malgeniada si el hecho lo provocaba, y bueno llegué a la casa de la prima Anny, una casa enorme de dos plantas con garaje, algo me había comentado mi mamá, que había Sido una talentosa gerente en un banco y bueno ahorro lo suficiente y se jubiló antes de tiempo, Llegue a a la casa de la prima, golpee la puerta por un rato, no salía nadie, a la media hora llega una señora alta con una falda larga hasta los tobillos con una blusa enorme, que la hacía ver gorda, pero algo que me sorprendió fue su rostro, era el de una señora, no lo niego con una que otra arruga, pero tenía unos labios carnudos y unos ojos azules claros que me hipnotizaron, era ella anny, la saludé, ella se disculpo por llegar tarde y me hizo seguir a su casa.
Era un lugar enorme definitivamente bien decorado, me llevo al segundo piso y me mostró el cuarto que ocuparía, me instale y bueno cuál fue mi gran sorpresa que cuando baje la prima anny se había cambiado de ropa, en esta ocasión llevaba un top ajustado ...

... que remarcabanb su gran y amplio tetaje que está señora llevaba, y un shorts también ajustado que dejaban apreciar una cola enorme, yo tratando de no dirigir por mucho tiempo en su cuerpo  miraba hacia los lados, yo para disimular mi nerviosismo y romper el hielo le dije que me sorprendía su buen estado de salud y atlética que se veía, le dije que mi madre me había dicho que tenía más de 50, pero que no se le notaba, a lo que ella sonrió y dijo gracias Josesito, es que hace un par de años llevo una dieta saludable y que no me negaba que se había hecho unos retoques, desde ese día, que de flechado y no podía dejar pasar a este hembronon.
La prima durante el día no permanecía en la casa, se iba bien temprano y llegaba en la tarde nos veíamos para cenar y se encerraba en su habitación, los fines de semana yo mantenía con las hormonas alborotadas, ya que ella se paseaba por la casa con unas pilamas que dios mío, era paja segura al dentrar a mi habitación, llego el momento que dije, ya no aguanto más esa prima tiene que caer, y bueno comencé a ser más amigable y cariñoso, entonces armaba conversaciones en las cuales ella hablaba , hablaba y hablaba, bueno en todo caso me fui ganando su confianza, luego comencé hacer un poco más confiansudo, comencé a abrazarla y a tocarla por más tiempo, hasta que bueno la invite a salir a bailar, dios que persona para ser más descordinada, era malísima bailando, estaba algo decepcionado, pero al verla con ese vestido rojo ajustado se me olvidaba, ...