Esposos complices cap 14 - Relatos Eróticos

Esposos complices cap 14

... vieron bajar pir la escalera oficial, los acompañe media hora para luego irme otra vez a hacer mi papel de mirona. Luego de dos horas se despudieron y mi espiso dándome el encuentro subimos al dormitorio y con lujos de delalle mi esposo sevpusi a mil y yo que ya esta arrecha, cachamos muy rico por dos horas.

El detalle fue que Hugo la tiene mas larga, dura y que nea mucho
Carlos en segundo puesto pero más cabezona y tambien dura
Lucho mas chica pero bien gruesa y con bastantes venas. Y los otros dos mas pequeñas. Mi esposo me pregunto si deseaba alguna le respondí que las tres primeras, pero solo para llevarle la corriente y seguir cachando rico.

A los tres meses se emborracho Lucho y tuvo quedarse en casa, por mas intento que hicimos paracquecse vaya con el resto, no despertaba y tuvimos wue cubrirlo con una manta. Ya cachando rico con mi esposo escuchsmos un fuerte ruido, se hsbia caido al suelo el borracho, lo tapamod bien y lo dejamos alli paracseguir con nuestra cacería y en ese momento mi esposo me dice, ahora que está en ese estado se lo agarrarias? Pense un buen rato y estando segura mi imagen le dije ...

... que SI, bajé atrás de el, siempre cubriendome. Lo destapó le dio dos cachetadas y como l muerto. Le bajó el cierre pero como su pinga estaba medio dura, le bajo el pantalon y pude ver de cerca y era una buena pinga, escondida atras del mueble solo estiraba la mano para acariciarle, pero viendome segura agarre ña pibga en toda su extensión, acariciaba las venas pronunciadas y con las dos manos pesaba sus huevos. Era una delicia tener eso en mis manos acariciarlos y mejor aún con la aprobación de mi esposo. Eraotra cosa diferente verla solo por el hueco, mi esposo mr hizp señas para que se la chupe, yo también queria pero me hacia la difícil, hasta que me la trague lo mas que pude y notaba que se me venia un orgasmo, tuve que disimular para que mi esposo no sevsienta mal, haciendo el esfuerzo para que me entre toda, ek borracho dijo unas palabras que no se rntendieron y se dio la vuelta, yo me corri al dormitorio muentras mi esposo hacía esfuerzo para ponerlo boca arriba, ya no se pudo y nosotros continuamos con nuestra cacheria ahora mas ardiente por el nuevo paso que habíamos dado


Continuará rn el próximo capítulo