1. Una noche llena de sexo entre primos hermanos


    Fecha: 26/05/2023, Categorías: Incesto Autor: Panda_abr, Fuente: CuentoRelatos

    ... ese olor inconfundible que las mujeres producen cuando están excitadas y la moví lentamente para poder besarla con libertad y seguir arrimándole el miembro.
    
    Me comí sus labios y su lengua con desesperación y ella respondía con la misma intensidad, mis manos comenzaron a tocar sus pechos turgentes y le bajé el vestido strapless, ¡no uso brasier esa noche! y por primera vez admiré esos grandes pechos, firmes coronados por un par de pezones morenos, pequeños, parados y no pude mas y los lamí los succioné mientras Lili se retorcía de placer.
    
    Comencé a acariciarla y metí mi mano por debajo de su falda y acaricié su coño sobre la pantie y me di cuenta que estaba muy mojada y con la otra mano bajé el cierre del vestido y se lo quité sin que ella protestara.
    
    Los zapatos los habíamos dejado en la sala y me quité los calcetines, (una señora madura de la que aprendí muchísimo me dijo que no hay nada mas desagradable que ver a un hombre desnudo con calcetines), me quité también el pantalón y en los bóxer se veía la gran erección que me causaba tener a Lili casi desnuda en la cama.
    
    Comencé a besarle los pies y fui subiendo a las pantorrillas, lamiendo, besando, mordiendo y cuando llegué a sus muslos abrí sus piernas, ella las cerró y apretó pero su excitación ya no le permitía detenerse y fue cediendo ante el embate de mis dientes y mi lengua que lamia sus piernas hasta llegar a su coño y lamia el pantie que olía y sabia a sus flujos deliciosos.
    
    Cuando por fin fue ...
    ... separando sus muslos sus piernas temblaban de excitación, yo daba pequeñas mordidas con los dientes en la entrepierna, le mordí el coño sobre el pantie durante un rato para disfrutar sus gemidos, después comencé a lamer su abdomen, seguí subiendo y volví a lamer esos pechos que me volvían loco por su tamaño y su firmeza.
    
    Le quité muy lentamente el pantie y al irlo bajando despacio vi su coño peludo sin ningún arreglo que brillaba a la luz tenue que se filtraba tímidamente desde la ventana del cuarto y lo acaricié dejando que mi dedo medio se introdujera un poco entre sus labios vaginales, lento, de arriba a abajo, desde el clítoris hasta el ano y besé su abdomen y cuando iba a comerme su coño ella me dijo:
    
    -cógeme te quiero tener adentro, ya no aguanto
    
    Hasta ese momento no habíamos dicho una sola palabra y al oír su voz al verla desnuda y recordar quien era me excité más de lo que estaba, mi erección creció y ella lo vio y solo lamió sus labios, me quite el bóxer y me acomodé entre sus piernas y con mi verga comencé un masaje a su clítoris que estaba empapado en sus flujos, recorría todo lo largo de su coño una y otra vez, me acerqué y empecé a meter la cabeza de mi verga y repentinamente me agarró las caderas y me detuvo:
    
    -que estamos haciendo, somos primos, ¿y si me embarazas?
    
    -nos casamos –le dije.
    
    Hasta ese día pensé que era virgen y cuando aflojó las manos en signo de aceptación, mi verga se deslizó hasta el fondo, ella grito gimió y comenzamos e movernos ...