1. ¡No me cabe!


    Fecha: 12/03/2023, Categorías: Anal Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos

    ... quería y me hizo la pregunta para ponerle sazón a la conversación:
    
    —Ya que tenemos un acuerdo de entera privacidad Tony, ¿cuál es tu fantasía sexual?
    
    —¡La verdad que me gustaría penetrar a una linda mujer como tú analmente!
    
    —¿Cómo? ¡Nunca se lo has pedido a tu esposa!
    
    —¡La verdad que nunca! Eso es un tabú para ella.
    
    La verdad que le mentía: no tenía esposa y a todas las mujeres con las que he estado en la cama, la gran mayoría les he hecho el sexo de los dioses griegos y a muchas a su gran mayoría les he hecho vivir orgasmos anales. Sabía que terminaríamos en la cama, pues Yaneli era muy abierta y con esas intenciones se me había acercado. Ella continuó diciendo:
    
    —La verdad que no tengo experiencia en el sexo anal, pero si gustas lo podemos experimentar y de esta manera cumples tu fantasía y yo aprendo más del sexo.
    
    —¿Estarías dispuesta?
    
    Ella me dio las coordenadas para llegar a su casa y me pidió que llegara a cierta hora específica, pues intuyendo cómo funcionan las mujeres, quería estar lista y preparada en todos los sentidos para lo que podría ser una buena faena. Habíamos acordado no usar preservativo, pues según ella se cuidaba a pesar de que desde que tuvo a su hija, ella se había esterilizado y no quería volver a salir embarazada que, incluso tomaba pastillas para no tener el más mínimo riesgo.
    
    Me fui del restaurante después de haberme dado una ducha en la oficina de mi hermana. Tomé una botella de vino de la cual nunca abrimos, pues ...
    ... Yaneli estaba tan caliente que no nos recordamos de abrirla. No estaba muy lejos del restaurante y solo me tomó diez minutos en llegar. Toqué el timbre y salió a recibirme y ya estaba cambiada. Podía darme cuenta de que se había dado una ducha y ella vestía una falda bastante corta y una blusa blanca donde podía ver esos hermosos pezones que se marcaban. Solo abrió la puerta y nos comenzamos a besar. Nos comimos a besos hasta que poco a poco me fui deslizando por su cuello. Yaneli solo jadeaba de placer y podía sentir como sus brazos morenos se erizaban. De aquella manera de beso en beso llegamos hasta el segundo piso donde estaba su habitación. Tenía velas encendidas con un aroma dulce muy agradable.
    
    Continuamos con los besos y llegué hasta esos hermosos pechos que estaban libres sin sostén por debajo de su blusa blanca. Me puse a mamarlos como un niño hambriento y le pregunté: —¿Te gusta que te los mamen delicada o bruscamente? Ella solo me contestó: —¡De las dos maneras! Me fui por sobre ella en la posición de misionero, pero aun vestidos y solo le descubrí esos hermosos melones que deberían estar en la medida D, y los mamé a placer hasta morderlos bruscamente. Cuando le removí la falda, podía observar unas pantis blancas estilo bikini, las cuales mostraban esa humedad donde sus jugos vaginales habían atravesado la tela. No se los removí, y sobre la tela delgada de su bikini le comencé a chupar su pepita, la cual estaba totalmente bien depilada y tenía un sabor saladito muy ...