1. Mi alumno, 28 años más joven que yo


    Fecha: 21/01/2023, Categorías: Infidelidad Autor: Lara, Fuente: CuentoRelatos

    ... sus dedos empezaron a tirar de ellas hacia abajo, bajando por mis muslos y quedando enganchadas al final en uno de mis tacones, mi vulva desnuda esperando a ser acariciada, lo deseaba, deseaba sentir su boca sobre ella algo que nunca antes había sentido.
    
    Empezó a lamer mi clítoris y a meter su lengua en mi vagina, mi marido nunca hizo nada parecido y estaba experimentando sensaciones nuevas para mí, sus dedos empezaron a recorrer mis labios menores humedecidos, abriéndolos y encontrando mi vagina, suave, rosada y lisa besándola con sus labios a la vez que metía su lengua dentro de ella, sus dedos no paraban de acariciar mi clítoris, primero un dedo, luego dos, los movía en forma circular apretando suavemente.
    
    No podía parar de gemir nunca había sentido tanto placer, ni cuando mi marido me la metía y no tarde en experimentar algo nuevo para mí, como mi vagina se inundaba de flujo vaginal, como mi vientre empezaba arder, mis piernas empezaron a temblar y como una fuente empezaba a expulsar una especie de líquido transparente a la cara de mi alumno que no paraba de lamer mi vagina.
    
    No pude más que gritar de placer cuando me corrí, fue el primer orgasmo que había tenido en mi vida, tantos años haciendo el amor con mi marido y nunca algo ni tan siquiera parecido, Sergio no se paró allí y continuo dándome placer, me levanto y bajándose los pantalones saco un pene descomunal que empecé a chupar, a Carlos, mi marido le encantaba que se la chupase y no para de compararlos, ...
    ... ahora tenía entre mis manos al campeón y salivándolo, envolviéndolo entre mis labios y metiéndolo muy dentro en mi boca, veía a mi alumno disfrutar con aquella mamada, mis manos subían y bajaban al mismo tiempo que mi boca.
    
    —Ven aquí profe que te voy a follar como a una perrilla, te la voy a meter, pero no quiero que grites, si gritas paro. —Me estaba hablando en un tono soez y me estaba excitando aún más, me gustaba que dijera esas cosas, cada vez me ponía más caliente.
    
    Me puso de pie de cara a la mesa y subiéndome bien la falda busco con su glande mi vagina y empezó a metérmela, su pene entraba en mi vagina como un cuchillo en la mantequilla, la tenía muy mojada y eso hacía que entrara desde un primer momento sin remisión hasta el fondo de mí, no había dolor como cuando lo hacía con mi marido, solo placer desde un principio, mis pechos en sus manos apretándomelos y mis pezones entre sus dedos pellizcándolos, su cadera empezó a empujar con fuerza lanzando su pene contra mi vagina entrando y saliendo una y otra vez.
    
    Mis gemidos empezaron a ser más altos de lo normal, no quería que parara y tuve que taparme la boca con mis manos para silenciarlos y que siguiera, cada vez más rápido y cada vez a más sensaciones al notarle tan dentro de mí, pasaba el tiempo y no paraba, Carlos ya habría terminado hacía tiempo, pero él seguía, me la saco de repente y me dio la vuelta como si fuera una muñeca, tiro el resto de las cosas de mi mesa y me subió a ella subiéndose tras de mí, se ...