1. Placer con mi Jefe en su cumpleaños...


    Fecha: 29/11/2022, Categorías: Confesiones Autor: elizabethamior, Fuente: RelatosEróticos

    Hola a todos! Mi nombre de pila es Diana, tengo 42 años, estudié abogacía y gracias a lo cual me gano la vida. Me especializo en derecho penal (no es fácil para una mujer), donde abundan los varones. Soy secretaria de un juzgado penal en la ciudad capital federal de Buenos Aires. Hoy es 30 de abril de 2019, y decidí romper mi represión aunque sea por aquí. El fin de semana pasado, mi jefe, es decir “el juez” me invitó a su fiesta de cumpleaños, sus 60 años. Como estoy actualmente sin compromisos sentimentales, me fui a su fiesta el día sábado el 27 de abril pasado. Advierto que jamás asocié mi trabajo con otras actividades. Llegué a su apartamento en la muy lujosa zona de Puerto Madero, más exactamente un piso 15°, deslumbrante vista al Río de la Plata. Apenas entré, mucha música pero pocos invitados. El anfitrión – el juez – mi jefe, me presentó a sus pocos invitados, la mayoría hombres. Obviamente todos magistrados del poder judicial. Así fue, que me fui introduciendo en las conversaciones de los invitados.
    
    Todos a mi entender eran mayores de 60 años. Aclaro, muy buen ambiente con muy buena música, música muy pero muy romántica (que me llamó mucho la atención), dado que había tres o cuatro parejas conocidamente establecidas. Mi jefe – el juez – estuvo para conmigo muy pero muy condescendiente. Realmente, en lo personal, la pasé muy pero muy bien; buena música, comida, vino, champagne (francés), todo de primera. Eran ya casi las tres de la mañana, (había llegado a las 21 ...
    ... h) y ya no quedaban nadie, excepto el anfitrión mi jefe - juez) y otra persona a quién esa noche conocí. Ergo, nos quedamos los tres.
    
    Yo, dada la hora, anuncié mi retirada. Pero, mi jefe me invitó a quedarme un rato más, dado que era día no laborable el domingo. Me quedé. Pero para mi sorpresa, Raúl (mi jefe) me invitó con champagne francés. Debo decir, que durante la velada, tomé pero no para enloquecer. Opuesta fue, mi respuesta luego. Juro que comencé a enloquecer con la música romántica, Julio Iglesias y Luis Miguel (los amo!). De pronto me encontré sola bailando románticamente con la persona que apenas conocía por su nombre “Diego”, y mi jefe observando. Juro, que a esa hora ya estaba bastante desorganizada mentalmente (champagne!!!!!!), y me encontré con la lengua de Diego dentro de mi boca……y apretándome muy fuertemente desde mi cintura. Notaba que algo importante conjugaba en nuestra pelvis, a ese momento. Yo, al contrario de todo lo esperado, seguía la música y los quehaceres de Diego, más respondiendo a sus besos y a su apretada pelviana.
    
    La hago cortita, al poco rato yacía semi desnuda, en una espléndida cama a la luz de una luna llena hermosa, frente a una vista formidable del Río de la Plata. El tema, era que tenía frente a mí, a dos hombres desnudos coqueteándome mis pechos y lamiéndome el clítoris. Por obvias razones que no vienen al caso, yo estaba en una embarazosa situación de placer y éxtasis. No deseo, sinceramente ser extensa, al rato me encontraba ...
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