La vecina
Fecha: 23/11/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... canturreando y bailando la observo.
- ¿Cómo te gusta el café, vecino? – me pregunta.
- Me llamo… - empiezo a decir, pero me interrumpe.
- Nada de nombres, vecino y vecina está bien. – me responde.
- Me gusta templado y con dos de azúcar. – le contesto.
- Vale, aquí lo tienes; pruébalo y dime si está bien. – me pide.
- Está muy bien, me ha gustado tu oferta. – añado para empezar una conversación con ella.
- Solo pensé que era una tontería estar solos cada uno en su casa, si tú me miras todos los días; te enseño cada día, es mejor…tener compañía, eso pensé. – me dice sus pensamientos.
- Si, la verdad es que estoy de acuerdo; me gustaría tener tu compañía. – me sincero.
- Ya la tienes, ¿y ahora qué? – me pregunta, tajante.
- ¿ya quieres que me lance? – le pregunto, intimidado.
- ¡No! Sería mejor conocernos, pero antes; ponte cómodo. – me pide.
- Ya estoy cómodo, mujer. – le respondo.
- No, cómodo asi. – dice y se agarra las tetas.
- ¿Ah? Que me desnude ¿no? – le pregunto y ella asiente.
Con todo el corte del mundo me voy quitando prendas hasta quedarme en bóxers, ella se fija en mi cuerpo; en la erección, sin ningún tabú y le doy la ropa.
Ella la doble y la pone bajo el mueble de la tele, que está encendida; bajita, me siento en la silla.
- ¿mejor? – pregunto súper cortado.
- Súper bien, veo tú ya venias preparado. – ríe divertida.
- Si, tu llevas unos meses preparándome. – le confieso.
- Eres muy gracioso, eso me ...
... gusta. – ríe y se me agarra del brazo, como si no estuviéramos desnudos.
- Me gusta lo natural que eres. – apunto, ella sonríe.
- No hay que avergonzarse del cuerpo, nacimos asi; solo hemos crecido y nos hemos desarrollado. – me responde, como si no pasara nada.
- ¿entonces qué pasa si te cojo una teta? – le pregunto.
- No se prueba. – me propone.
Agarro una teta suya con cierta timidez y apuro, es bastante blandita y jugosa; ella pone cara de gusto, pero no pasa nada.
- ¿Qué paso? – me pregunta.
- Nada – respondo.
- ¿y ahora que vas a hacer? – me pregunta.
- Seguir, porque si no pasa nada; ¿para que parar? – la interrogo y ella solo sonríe.
Le magreo las tetas, durante un buen rato; ella se deja en silencio, aunque su olor a cambiado y noto que se está excitando.
- ¿solo te gustan mis tetas?
- Me gustas entera
- Entonces, ¿Por qué solo tocas mis tetas?
Veo su cara de lascivia, como abre las piernas; una de mis manos se dirige a su entrepierna que esta mojada y mis labios se dirigen a su boca. Ella agarra mi herramienta, primero como yo por encima de la tela; pronto nos sobra la tela a los dos, asi que ella empieza a hacerme una paja y yo empiezo a hacerle unos dedos.
Nuestras bocas se devoran, mis manos exploran sus tetas; ella se desnuda al poco, me desnuda y se me sienta encima de cara. Le como las tetas, mientras se la mete sin contemplaciones; ella gime y dice cosas en su otro idioma, eso me pone y le doy más fuerte. Ella grita me ...