1. Atroz


    Fecha: 15/09/2022, Categorías: No Consentido Autor: Vlad escritor, Fuente: CuentoRelatos

    ... mujer.
    
    Al término decidió abrirle la boca para profanarla con su erecta verga. Acomodadas en 69, Boss disfrutaba por vez primera los fluidos de la recién fallecida.
    
    Ahora la acomodo sobre sus rodillas a modo que sus redondas nalgas apuntaran hacia arriba.
    
    De dos golpes, pudo penetrar el cuerpo inerte de su presa.
    
    Ohhh! Que placer sentía aquel maldito; tanto que sus ojos se hallaban totalmente en blanco, su lengua de fuera, disfrutando el sabor de la sangre.
    
    Saliéndose unos segundos del ahora cadáver, volvió a tomar impulso y penetro la vagina de su vecina. No conforme, siguió golpeándole aquel bello rostro, insultándola y volviéndola a ahorcar.
    
    Sus manos bajaron a sus bien formados y gentiles senos para apretarlos con desesperación y fuerza.
    
    Sus dientes arrancaban parte de los labios de aquella infeliz mujer.
    
    Habría pasado no más de una hora, profanando aquel cuerpo sin vida, cuando pronto salieron los disparos de semen, dentro de aquella cueva sin vida.
    
    Habiendo hecho esto. Boss quedo mirando el cuerpo de Julia, tendido sobre esa manta blanca, con rastros de sangre.
    
    El aire soplaba cada vez más frio.
    
    Pero, ni eso, ni la culpa de lo ocurrido, hicieron que el hombre volviera a degustar del cuerpo de su víctima.
    
    Sus clavadas eran de lo más rudas que podía; tanto que si la chica estuviera viva no soportaría tanta rudeza o en su defecto el dolor.
    
    De nueva cuenta su boca, su vagina, su culo, eran profanados a ...
    ... gusto y control de ese hombre de familia. Aparentemente cachondo, pero respetuoso con los demás.
    
    Una carcajada se levantó en el ambiente.
    
    Era nada menos y nada más que Boss, expulsando su segundo orgasmo.
    
    Pasaron casi 60 minutos, cuando el cuerpo de la chica empezaba a mostrar aspectos del rigor mortis.
    
    Aun así, vendría la tercera violación al cadáver.
    
    Enfermizo, deplorable, atroz para una persona como Boss.
    
    En ese instante no le importaba nada en el mundo. Solo el hecho de poseer a su más grande fantasía. Julia.
    
    Pero. ¿Qué caso tenía el haberla matado para saciar sus más bajos instintos? Eso jamás lo sabremos.
    
    Con apenas en control de movimiento con la difunta, vino el tercer y último disparo de semen; disparo que casi lleno la boca de la que alguna vez fue una hermosa mujer.
    
    Limpiando todo rastro de su cuerpo. Boss, limpio solo la vagina de la joven. Que a pesar de haber fallecido de una manera escalofriante reacciono como si hubiese tenido placer alguno.
    
    Con maestría Boss se deshizo del cuerpo, llevándolo a lo más profundo de donde se encontraban y así nadie sabría del paradero de la chica.
    
    Todo limpio, todo como si nada hubiese pasado, el hombre regreso a su casa con su familia, disfrutando de una rutinaria, pero feliz y tranquila cena.
    
    El trofeo más duradero de Boss; aquella tanga color roja, manchada de fluidos y sangre de la inocente Julia.
    
    Si notas varias faltas de ortografía, te ruego me disculpes. 
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