COGIENDO CON MI TIA - Relatos Eróticos

COGIENDO CON MI TIA

Hola a todos este será mi primer relato y mi nombre será Netogato el de mi tía será Erika, todo comenzó cuando yo tenía 18 años y ella 28, somos del distrito federal, México. Erika llego de visita a casa de su padrino, otro de mis tíos y de tanto estar platicando dieron las 8 de la noche a lo que me pidió que la acompañara a su casa, le dije que sí. Erika: que no fuiste haber a tu novia Netogato: no, ya termine con ella Erika: porque acaso no se llevan bien Netogato: si lo que pasa es que no sé cómo decirte, me da pena Erika: dime a lo mejor te puedo ayudar Netogato: lo que pasa es que cuando estoy cerca de ella, me excito muchísimo y cuando siente mi pene parado se enoja conmigo. Erika: y que nunca has tenido relaciones con ella, oh, porque se enoja acaso no le gusta. Netogato: la verdad no se, nunca pasamos de besos y una que otra repegada pero nada mas. Erika: no me digas que sigues virgen, que nunca has estado con una mujer. Netogato: mira ya en confianza una vez en la secundaria la prima de uno de mis amigos me dijo que me la cogiera, en el salón pero con los nervios nunca supe si se la metí o no. Erika: sabes sobrinito llegando a mi casa, dormiré a los niños y como es viernes tu tío no va a llegar así que tenemos toda la noche, para darte unas ricas clases de sexo. Netogato: es en serio lo que me dices. Erika: claro hijo que mejor que alguien de la familia te enseñe las cosas del amor. Llegamos a la casa y entrando vimos que mis primos, ya estaban en su cama y nos ...

... metimos a la cocina ahí empezamos a besarnos y acariciarnos, ella bajo su mano buscando mi verga por encima de mis pantalones, diciéndome, sácate la verga quiero ver de qué tamaño la tienes, ( no es por dárselas a desear pero mide, 17 cm. y es gruesa según ella muy rica ) Erika: hijo que rica esta porque nunca me dijiste que tenias esta ricura, sabes vamos hacer muy felices de aquí en adelante. Netogato: te gusta, me darías una mamada. Erika: no una corazón ya verás las cosas ricas que sé hacer. Diciendo eso se hinco y empezó a chupármela muy rico, primero despacio y después fue acelerando el ritmo, de vez en ves, me decía que la tenia riquísima y que siempre seria de ella, Yo por mi parte le acariciaba sus senos que en esos momentos para mi eran enormes, ya que jamás había visto unos en vivo y a todo color Netogato: sigue así tía hermosa, que bien me la mamas, uuufff síguele, síguele. Erika: sabes ahora quiero que tú me mames mi panochita, yo te voy a ir diciendo como le hagas venta para mi recamara ahí estaremos mucho mejor. Ya en la recamara nos desvestimos y ella se recostó en la orilla de la cama levantando sus dos piernas quedando su gran panocha al descubierto, con esa gran mata de pelos que la rodean, se veía muy rica Erika: ahora hijo mete tu cabeza entre mis piernas y comienza muy lentamente a chuparme la panochita que de ahora en adelante es toda tuya, cada que quieras cogerme aquí estaré disponible. Netogato: me incline y por primera vez percibí el olor a esa panocha, ...