1. Mario (15 de 22): Un año que pasa rápido


    Fecha: 10/08/2022, Categorías: Gays Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    En este tiempo transcurrido Guillermo había ido cambiando paulatinamente sus costumbres, ahora no le importaba que fuera a su casa estando los empleados, no todos ya que aprovechaba para darles días libres de los que les pertenecían.
    
    Justa, la cocinera, que había trabajado con mi abuela, Rodolfo, su mastodóntico hombre de confianza (entonces supe su nombre), eran las personas que siempre estaban allí. Justa para prepararnos las comidas y Rodolfo se encargaba de recoger el todo terreno con las motos, lo que antes hacíamos nosotros, también nos acompañaba al monte pero no siempre.
    
    Suponía que todos ellos imaginaban lo que yo hacía allí, y no me importaba en lo más mínimo, me respetaban y para todos era Mario, simplemente el nieto de la señora Rosa y don Román.
    
    También había dispuesto que usara una de las habitaciones del piso alto, al lado de la que pertenecía a Robert, no sabía si lo quería así para que no pareciera tan descarado y obvio que era su amante.
    
    Rodolfo nos dejaba en casa después de bajar del monte y marchaba con el coche a la gasolinera, Justa nos preparaba la comida, actuaba prudentemente dejándose notar lo imprescindible, nosotros actuábamos con la misma naturalidad con que pudieran haber vivido Guillermo y Robert.
    
    No cambiaba sus costumbres de follarme dos veces, al menos, en la noche del viernes y otra más las tardes de los sábados. Me hacía gozar de su hombría y si él se retrasaba en actuar, era yo quien lo pedía.
    
    Desconocía si para ...
    ... Guillermo, esas tres corridas semanales, le eran suficientes, o si tenía encuentros con otros hombre o mujeres en los días que no me tenía a mi. Yo me conformaba y aguantaba a que llegaran los viernes, pero con unas ganas enormes de verga, siempre tenía ganas. Guillermo había conseguido enviciarme y lo necesitaba con más frecuencia.
    
    Procuraba centrarme en los estudios, rechazaba los frecuentes ofrecimientos que me llegaban de compañeros de la universidad, de profesores y sobre todo de Lorenzo y mi primo que no perdía oportunidad para pedírmelo.
    
    Esa semana partiría para Japón y no tenía fijada la fecha de vuelta.
    
    -¿Qué voy a hacer sin ti papi? Va a ser muy largo y podías pensar en que día volverás. -le acariciaba el pecho recostado sobre él, sin querer tocarle demasiado para poder hablar con cierta frialdad.
    
    -No puedo precisarlo bebé, tengo que analizar el tema de esa concesión de coches para implantar en nuestro país, ya te hablé de ello, tengo que estudiarlo con detalle para tomar una decisión, preveo varios desplazamientos allí.
    
    -Te voy echar de menos, a ti y a tu amiguito al que adoro. -pasé la mano por sus gordos huevos sin llegar a tocarle la polla.
    
    -Mi verga y yo también vamos a pensar mucho en nuestro bebé. Si lo deseas puedes venirte los sábados para que Rodolfo te lleve y sigas entrenando, para lo otro no tengo una solución.
    
    -¡Ja, ja, ja! Eres increíble papi, ¿no te importaría que me entregara a otro hombre?
    
    -NI puedo, ni quiero hacerlo.
    
    -¡Gracias ...
«1234...8»