1. Pagando un favor


    Fecha: 09/08/2022, Categorías: Confesiones Autor: M, Fuente: CuentoRelatos

    ... pezones con uno de sus dedos empezó a darle vueltas hasta que se puso duro, ahí fue cuando llegó el momento de que los chupara. Se acercó rápidamente y empezó a besar mis pechos todo alrededor y al llegar al pezón lo mordió lentamente que fue inevitable gemir de placer, así descubrió lo mucho que estaba disfrutando de todo lo que hacía.
    
    Me volteo a ver y con una sonrisa pícara continuo a mi otro pecho esta vez mordió mi pezón con más fuerza, mi respiración era entrecortada, yo solo podía alborotar su cabello, mientras besaba mis pechos puso su mano sobre mi pantalón a la altura de mi vagina, yo ya estaba mojada, así que lo noto y rápidamente metió su mano debajo hasta llegar a mi vagina.
    
    Eso me sobresaltó pero yo quería que continuara, quería sentir sus manos, primero comenzó jugando con mi clítoris, con dos dedos lo movía de un lado a otro de forma rítmica, ya en este punto a cada movimiento hacia un gemido, cuando de un momento a otro metió sus dedos dentro de mi vagina, grite de placer, se sentía tan bien.
    
    Él se detuvo en seco y fue a su cuarto por condones. Me llevo a la cama pero yo no quería, me negaba a tener relaciones sexuales, solo pude decirle que no quería, él ya me ...
    ... había bajado el pantalón y veía mi vagina enfrente de él, ya con su pene todo erecto, vio como me negaba a hacerlo y lo acepto.
    
    Me agarró de la mano, me subí el pantalón y nos levantamos de la cama, ya en el comedor me dijo que si al menos se la mamaría, eso sí lo puedo hacer pensé, así que le dije que sí.
    
    Aún seguía muy excitado pues su pene estaba muy bien parado y duro, lo metí a mi boca, comencé solo sacándolo y metiéndolo, después seguí con mi lengua la pasaba por arriba y por abajo, cada vez que entraba y salía, cuando estaba afuera ponía mi lengua encima y formaba círculos alrededor de todo el pene.
    
    Después de unos minutos se vino, fue mucho, por alguna razón sabía mal y no me lo pude tragar, cuando terminó fui a la cocina y lo escupí en la tarja. Se subió el pantalón y nos preparamos para irnos, pues él tenía que ir al cine y yo a mi casa.
    
    Él siempre me pregunta porque no quise que nos acostáramos ese día, la respuesta es simple, yo me sentía en deuda con él por todo lo que había hecho en el día, así que pensé que era una forma de agradecerle pero cuando estábamos a punto de hacerlo me arrepentí y por eso no seguí adelante. Perdón, pero mis motivos no eran los correctos. 
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