1. Un hijo ayuda a su madre, todo lo hace por amor


    Fecha: 21/07/2022, Categorías: Incesto Autor: Aldebaran, Fuente: CuentoRelatos

    Julia y Juan son un matrimonio corriente. Ella tiene 50 años y el 60, se llevan diez años de diferencia, pero han sido felices siempre. Tienen un hijo de 19, Luis, que los quiere mucho. Lo tuvieron algo tarde por circunstancias de la vida, pero ahora todo va a tomar otro cariz.
    
    Desde hace un tiempo, Juan sufre de impotencia, por lo que no puede hacer el amor con su mujer. La última vez que lo intentó fue frustrante. Su pene no se enderezaba y aunque llegó a penetrarla, no pudo seguir con el coito.
    
    Su mujer empezó a desesperarse. Juan no podía hacérselo y a ella le estaba entrando vaginismo. Ya casi ni con sus dedos podía masturbarse y mucho menos introducirse un dildo.
    
    Decidieron ir a un sexólogo, después de descartar que su impotencia fuera algo físico. El medico era algo peculiar. Consideraba que para que Julia tuviera una dilatación suficiente de su vagina para una penetración completa, debía, aparte de excitarse convenientemente, un pene de verdad. Un pene de carne y no un consolador de goma o de otro material para que se curara de su vaginismo, aparte de para una completa satisfacción sexual y un pleno orgasmo.
    
    Tras mirarse los dos se quedaron pensativos mientras el medico les contemplaba.
    
    -¿Han pensado en un amante, un amigo o un profesional?
    
    -No. Claro que no. Yo amo a mi marido. No voy a acostarme con nadie que no sea él.
    
    -Yo haría todo lo que fuera por satisfacer a mi mujer. Pero si no puedo y ella no quiere hacerlo con un desconocido, por ...
    ... supuesto lo respeto.
    
    -¿Tienen hijos?
    
    -Sí, ¿por?
    
    -¿Chicos o chicas?
    
    -Un chico.
    
    -¿De qué edad?
    
    -De 19 años.
    
    -¡Perfecto! Exclamó el médico.
    
    -¿Qué está pensando?
    
    -Su hijo es de la familia. Vamos, es como si fuera su marido. Le propongo que haga el amor con él.
    
    -¿Está loco? -Exclamaron ambos al unísono.
    
    Ya se levantaban cuando el medico les detuvo.
    
    -Esperen por favor. No se lo tomen a mal. Su hijo la quiere ¿no? -dijo mirando a Julia.
    
    -Sí, me quiere mucho. Pero eso no tiene nada que ver. Eso es sexo y el sexo entre familia no puede ser.
    
    -Si usted quiere volver a disfrutar del sexo y no quiere acostarse con un extraño o un profesional, debe hacerme caso. Si su vagina acaba cerrándose, lo pasara mal. Hágalo por su bien. Probablemente su hijo sea virgen. Si lo hace con él, estará haciéndole un favor a su hijo y también a usted. Piénselo.
    
    Se quedaron parados y finalmente volvieron a sentarse.
    
    -¿Y si mi hijo no quiere?
    
    -Muéstreselo como que está ayudándola, ya que su padre no puede. Si la quiere, seguro que acepta.
    
    Finalmente aceptaron ambos. Su padre estaba de acuerdo en que fuera su propio hijo el que se acostara con su mujer en lugar de un extraño.
    
    Antes de salir, el medico les dio una pomada.
    
    -Debe ponérsela su hijo alrededor del tronco del pene. Y la penetración ha de ser sin preservativo ni nada. Los primeros días deben hacerlo dos veces por semana. E ir aumentando hasta que lo hagan un día si y otro no. ¿Alguna pregunta que ...
«1234»