1. Anhelado paseo


    Fecha: 27/06/2022, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... Pensaba yo en que pude haber sido más erótica, desenfrenada y provocativa, no podía ser...
    
    Al terminar la canción, me dijo que lo hice muy bien. Se notó en su pantalón lo excitado que estaba… Le pedí recorriéramos el depto., así mi pololo tenía la oportunidad de entrar. Me mostró todo el lugar, mientras sentía el miraba mi cuerpo y estoy segura que le gustaba lo que veía. De camino a regreso al living y en el pasillo, tenía una barra para colgarse a hacer ejercicios, a lo cual pedí hacer. Estaba algo alta, por lo que le pedí me ayudara, tomándome de la cintura y levantándome a ella. Al levantarme con mi escotado vestido, mis pechugas rozaron su cara. Quedé colgada e intenté hacer una barra. Hice una con dificultad, que entre lo mareada y excitada no era sinceramente mi intención. Miré hacia la ventana donde estaba mi pololo y me di cuenta que había mirado todo, así que decidí hacerlo ahora, cumpliendo al fin mi sueño, mi fantasía que quise tantas noches en mi cama de verano… sentir ese pene de ese hombre robusto y alto, pensando sería un pene grueso y grande, pensarlo en mi boca explotando semen, en mi parte muy adentro, además en mi cola sintiendo ese agradable dolor…. Entonces lo miré y con mis piernas lo apreté fuerte, diciéndole que era para no caerme, mientras estoy sujetada arriba con mi manos y con un escote que le dejaba mis pechugas en su cara, comienzo a subir haciendo barras, para luego bajar apretando mis piernas alrededor de él, sintiendo su pene muy ...
    ... erguido. Hice este movimiento 3 veces antes de mirarlo y besarlo. Él no daba más de excitado, llevándome sobre una pared y metiendo una de sus manos en mis senos y besando mi cuello, mientras miro el techo. Me decía Claudia eres exquisita. Desabrochó su pantalón y sacó un pene de 25 cms. al menos y buscando entrar en mí. Cuando sentí estaba entrando, me dejé caer con fuerza y quizás fue demasiado. Lo sentí tan fuerte, que lo sentí hasta el cuello, dando un grito fuerte. Me moví mucho rato, dejando entrar cada uno de los centímetros de su pene delicioso y grueso. Terminó y me bajó. Lo siguió moviendo, a lo que me puse de rodillas y lo dejé en mi boca, dejando en mi lengua el resto de semen… lo moví, lo agité un buen rato mirándolo a la cara, verlo con los ojos cerrados y boca abierta, disfrutando a más no poder. En mi boca lo empecé a sentir nuevamente duro y crecido. Lo miré con más detalle, mientras en mi boca estaba con sus testículos… Me levantó y me dio vuelta, penetrándome fuerte… me daba con tanta fuerza que me hizo terminar al poco empezar, pidiéndole esperara. Lo saca y lo entra en mi cola… Nunca sentí un dolor tan grande, pero estaba tan excitada que no quería parara. Casi me rompe por dentro. Me encantaba como entraba y salía con rudeza. Francisco no pares, sigue fuerte, decía yo... Terminó y me llevó a su pieza. Mi pololo entró por la ventana a mirarme de cerca. Yo lo senté en su cama, mientras comencé chuparle el pene nuevamente. No era mucho lo que en mi boca entraba, ...