1. Buenas tardes, venía a depilarme


    Fecha: 10/06/2022, Categorías: Lesbianas Autor: franmm, Fuente: CuentoRelatos

    ... desabrochó despacio el sujetador y dejó caer sus preciosos pechos, con un tamaño y una forma que era la envida de sus amigas. Terminó con las braguitas, las bajó despacio, notando como su cuerpo quedaba libre de ataduras.
    
    Volvió delante de Marta, tapándose lo máximo posible con sus manos temblorosas. Era inútil, sabía que todo su cuerpo quedaría expuesto. Desnudo.
    
    -Puedes estar tranquila, he hecho esto mil veces. – Intentó relajarla. – Túmbate en la camilla, relájate…
    
    Muy despacio, Alicia se tumbó bocarriba en la camilla, con sus manos seguía tapando su pubis y sus pechos. “Qué inocente”, pensó Marta.
    
    -Tienes que relajarte, verás cómo esto no es nada. –La tranquilizó acariciando su hombro mientras se ponía unos guantes de látex blancos. -¿Cómo te llamas?
    
    -Alicia. –Tartamudeó.
    
    -Muy bien Alicia, voy a empezar por las piernas. Cuando terminemos aplicaré una loción para la piel irritada ¿vale? Abre un poquito las piernas.
    
    La esteticista separó sus muslos muy delicadamente y la chica se vio obligada a apartar las manos y dejar al descubierto su sexo. Estaba temblando. Marta no podía dejar de mirarla, su vello púbico, joven y aún disperso, apenas cubría su preciosa vagina. Eso, sumado a las preciosas curvas de sus pechos convertían a Alicia en una de las mejores clientas que habían pasado por sus manos… “Esto no puede quedar aquí”, pensó.
    
    Empezó a aplicarle la cera en las piernas y poco a poco la chica se fue relajando. “Pensaba que iba a ser más doloroso”. ...
    ... Las manos expertas de la esteticista ponían las bandas de cera y las retiraban con determinación y profesionalidad. Mientras, hablaban de temas sin importancia: las vacaciones, los planes de futuro…
    
    Terminó la parte inferior de las piernas y fue subiendo hasta llegar a los muslos. Alicia volvía a sentir calor, su cara volvía a ponerse roja porque sabía lo que le esperaba…
    
    -Esta parte es un poquito más dolorosa. Necesito que abras las piernas lo máximo posible, comenzaré por las ingles y me iré acercando a tu vagina, ¿de acuerdo?
    
    -Vale. –No pudo decir nada más. Abrió las piernas y dejó al descubierto su sexo desnudo.
    
    -Es muy importante que no te muevas para que no te haga daño.
    
    La esteticista colocó una banda de cera en una ingle y tiró. La chica no pudo evitar encoger las piernas y sollozar, le había hecho daño. Hizo lo mismo con el otro lado y antes de que tirara, la chica estaba temblando de miedo. Si eso había dolido, la parte “central” no la iba a aguantar. Tiró. Un grito ahogado salió de su boca a la vez que una lágrima baja por su mejilla.
    
    -Por favor, para. No puedo. Me duele mucho.
    
    -Tranquila Alicia, no es nada. En nada habremos acabado y te aplicaré una crema en esta zona para que te calme.
    
    Pasó la cera los labios mayores de la joven. Muy despacio, fue aplicando la cera y preparando el tirón. Alicia no paraba de moverse, aunque insistió Marta en que dejara de hacerlo no había forma. Tiró. Otro grito de dolor.
    
    La chica con su cuerpo desnudo, ...