1. Campamento con mi tímida novia (Final)


    Fecha: 05/06/2022, Categorías: Intercambios Autor: Homelander, Fuente: CuentoRelatos

    ... esto solo porque sientes que es a fuerzas, no quiero destruirte – decía histérica, casi enfada conmigo
    
    Yo: me encanta ver cómo te coge, quiero que lo siga haciendo – lo dije sin pensar, fue como lanzar una bomba, por los días anteriores quedaba claro, pero verbalizarlo de una manera tan devastadoramente honesta la silenció, me acerqué, ella me vio confundida, la besé apasionadamente – quiero que seas su puta – le dije casi susurrándole mientras nos besábamos
    
    Alejandra: ya soy su puta – me dijo cachonda acariciándome la verga
    
    Yo: quiero que siempre lo seas – le decía y las caricias subían a un nivel casi pornográfico en pleno campamento a vista de todos – que te utilice como su juguete sexual cuando él quiera
    
    Alejandra: lo iba a hacer de todos modos, no iba decirte nada – me decía cruelmente acariciando mi firme erección – le daré mi culo cuando él quiera porque me encanta su vergota gorda – decía y restregaba su vagina contra mi pene de una manera casi cómica – me coge mucho mejor que tú y ayer se lo dije cuando me la metía en la casa de campaña.
    
    Me decía sádicamente viéndome a los ojos, era obvio que era verdad, me quedaba claro, pero ese ataque de honestidad brutal que tuvimos uno con el otro completamente sobrios se sintió más real que sus histéricos gemidos ebrios de la noche anterior.
    
    Yo: ya lo sé – le dije besándola
    
    Alejandra: te amo – decía apasionadamente mientras yo sostenía su lindo trasero con ambas manos
    
    Yo: yo también.
    
    Pasó nuestro ...
    ... subidón de adrenalina y sadismo, terminamos de empacar alegremente y nos acercamos al auto de Randal, él esperaba.
    
    Randal: suban – decía tranquilamente, yo entré en el asiento trasero, jugando, aceptando y disfrutando la situación, ella reía un poco y entraba en el asiento del copiloto – menos mal que vas allá atrás, porque el que se sienta aquí – indicaba el asiento del copiloto – le toca darme mamadas mientras manejo – los 3 reíamos
    
    Yo: bueno, sin duda ella lo hará feliz – dije contento y ella me vio sonriendo y me besó dulcemente, agradeciendo que yo aceptara todo
    
    Randal: ya le dijiste lo que te haré – le decía a mi novia acariciándole la pierna
    
    Alejandra: no va pasar, estaba peda, no cuenta lo que uno dice pedo – decía riéndose
    
    Yo: ¿Qué cosa? – pregunté de nuevo ansioso
    
    Randal: ya verás ya verás… - decía riendo y comenzaba a manejar.
    
    Fausto me enviaba un mensaje preguntándome dónde estaba y diciéndome que no veía mis cosas, lo ignoré. Avanzábamos por caminos escarpados por unos 20 minutos mientras charlábamos cualquier estupidez.
    
    Randal: ¿Y dónde viven? – preguntaba de pronto
    
    Alejandra: en uno de los departamentos de esos cercanos a la facultad – decía con naturalidad, luego me lanzaba una miradita – lo conocerás pronto, ya me dio permiso de darte las nalgas cuando yo quiera – decía sádicamente lanzándome una mirada cruel, él me veía por el retrovisor sonriendo
    
    Randal: era cuestión de tiempo – decía y los 3 reíamos.
    
    Llegábamos a un pequeño ...