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DESPERTAR DE LA SEXUALIDAD DORMIDA POR MAPMAKER
Fecha: 29/05/2022, Categorías: Infidelidad Autor: mapmaker, Fuente: RelatosEróticos
DESPERTAR DE LA SEXUALIDAD DORMIDA POR MAPMAKER Luego de la dosis de verga que me proporcionó Julián y que fue el detonante que despertó mis deseos dormidos, decidí afiliarme a un gimnasio para tratar de tonificar mi cuerpo el cual mostraba el paso de los años por la flacidez y acumulación de tejidos adiposos en varias partes de mi anatomía; lo único que conservaba en buen estado físico eran mis piernas torneadas y casi perfectas; luego de un tiempo, los cambios en mis glúteos, cintura, abdomen y senos resultaron tan increíbles que tuve que cambiar la talla de todos mis vestidos. Por otra parte mi ginecólogo me recomendó ejercicios para tonificar mi vagina; todo esto dio los frutos deseados; él me sugirió como hacer los ejercicios pélvicos; me cito para ver los resultados; estando en su consultorio, me indico que me quitara la ropa interior y me acostara en el sillón de ginecología; así abierta de piernas empezó a examinarme; introdujo sus dedos en mi vagina palpando su interior. Me introdujo un vibrador para medir el grado de firmeza que había alcanzado mi vagina; el contacto con este me excitó, de inmediato sentí la humedad de los jugos que empezaron a inundar mi ardiente canal; me indico que contrajera la pelvis; sentí el medidor vibrando en el interior de mi sexo; cerré los ojos e instintivamente empecé a gemir; los gemidos se fueron convirtiendo en jadeos; entreabrí los ojos y observé al doctor desnudo sosteniendo su ...
... miembro erecto; me lanzó una mirada solicitando mi aprobación, le devolví la mirada asintiendo. Tenía un pene oscuro de considerable tamaño, no muy largo pero bien grueso con una cabeza acampanada en forma de hongo; lo colocó en mi empapada entrada; impulso sus caderas penetrándome suavemente hasta que nuestros pubis se encontraron; empezó a meterlo y sacarlo rítmicamente aumentando la lubricación; ocasionando sonidos de chapoteo; sentía aquella cabezota recorrer mi inundado túnel haciendo que jugos cálidos chorrearan fuera de mi sexo cada vez que retraía el miembro. El sillón de ginecología resulto muy cómodo pues tenía dos brazos ajustables donde descansaban mis piernas manteniéndolas completamente abiertas así que el doctor tenía las manos libres para acariciarme por todos lados; sentía los embates de su verga y sus empapados testículos rebotando en mis nalgas lo que aumentaba aún más mi lujuria; empezó despojarme de la ropa que cubría la parte superior de mi cuerpo; se inclinó y empezó a mamar mis pezones haciendo que mis gemidos aumentaran de intensidad. Las chupadas a mis tetas se tornaron más torturantes sacándome grititos de placer; mi vagina se contrajo violentamente a consecuencia del orgasmo que me acometió; esta contracción se repitió varias veces estimulando la verga del doctor que empezó a embestirme frenéticamente hasta que esta eyaculó su esperma en potentes chorros; sentí los cabeceos del grueso miembro al expeler el líquido seminal dentro ...