1. Hermanos (Parte II)


    Fecha: 29/01/2022, Categorías: Incesto Autor: Lara, Fuente: CuentoRelatos

    Nuestro hermano Juan parecía no dar abasto con las dos, a pesar de que se alternaba de una a otra, a pesar de querer satisfacernos a las dos, primero lamiendo a Eva, bebiendo de los néctares que emanaban del sexo de mi hermana y como todo un profesional le metía dos dedos en su vagina haciendo que Eva se revolviese en la cama con sus manos sobre su cabeza de Juan, tirándole del pelo cada vez que un gemido salía de su preciosa boca, mientras eso sucedía a mí me tenía totalmente abandonada sin dejarme mover apenas, no es que me importase, yo ya había tenido lo mío, a mí me había follado de tal manera que aún recordaba su pene entrando y saliendo de mi cuerpo, de los escalofríos de los ataques de placer cuando me provocó aquel delicioso orgasmo.
    
    Mi hermano parecía un dictador con nosotras sin dejarnos mover apenas, cada vez que me incorporaba para besar a Eva, él se cambiaba de lado y empezaba a lamer mi clítoris, a meterme sus dedos haciéndome que me tumbara de nuevo, las dos boca arriba con las piernas abiertas para él, disfrutando de su lengua y de sus dedos mágicos, pero también queríamos participar de aquel banquete de sexo oral y fue mi hermana Eva la que consiguió cortar sus ligaduras y lanzarse contra él cuando estaba entretenido entre mis piernas.
    
    A partir de este punto del relato, me pondré en la piel de mi hermano Juan e intentaré expresar lo mejor que pueda sus sentimientos cuando nos tuvo a las dos, cuando nos folló a las dos.
    
    Lara no paraba de mover sus ...
    ... caderas, sus manos apretaban mi cabeza contra su vulva, la lamía de arriba abajo con mi legua desde su deliciosa entrada vaginal hasta su clítoris, la oía gemir cada vez que me paraba en su clítoris, metiéndomelo en mi boca, fue increíble, al principio tan pequeño y ahora tan abultado, no sabía que eso le podía pasar a una chica y con Eva me había pasado igual, parecía que ese era el punto débil de las dos, porque no paraban de revolverse en la cama y de gemir cuando lo acariciaba bien con mis dedos o con mi lengua, otra cosa que parecía volverlas locas era cuando les metía los dedos corazón e índice en sus vaginas sacándolos y metiéndolos a modo de polla mientras les seguía lamiendo el clítoris, realmente estaba disfrutando de las dos, las tenía abiertas de piernas para mí, las tenía como un encantador de serpientes, haciendo bailar sus cuerpos, pensando a quien se la metería primero.
    
    No me di cuenta y Eva se había levantado, todavía no sé cómo lo hizo, pero con un movimiento rápido estaba con mi pene en su boca, lamiéndolo, mordiéndomelo con sus labios, se lo metía un poco, solo el glande y con su lengua dentro de su boca empezaba a moverla de un lado a otro, para terminar metiéndoselo entero, dejando la polla tan metida dentro de su boca que casi la daban arcadas, luego la volvía a sacar, con su mano derecha me iba haciendo una paja a la vez que subía y bajaba con su boca, haciéndome gemir y dejando de lamer a Lara, que con otro movimiento rápido se zafó de mí y se juntó ...
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