1. Chilena manoseada en público


    Fecha: 28/01/2022, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Me llamo Delia, tengo 59 años, vivo en Chile, tuve un largo matrimonio de 22 años, tengo hijos adultos. Actualmente tengo un novio y creo ser bastante feliz. Mi problema es que tengo una sexualidad muy desarrollada. Me gusta el sexo y el placer sexual. Mi novio no alcanza a darme sexo como a mi me gusta. Es más mi compañero que mi amante. Me penetra una vez cada diez días y todo es bastante rutinario. Confieso que he tenido otros amantes y sumando y restando puedo decir que mi ex marido fue un buen amante. Él ahora está casado de nuevo, sin embargo, cuando lo veo confieso que me tiritan las piernas.
    
    Tenemos 10 años de divorcio y esporádicamente nos vemos para el cumpleaños de nuestros hijos o para graduaciones y cosas así. Ocurrió con él algo que cambio mi vida.
    
    Hace cuatro meses, nuestra hija se graduaba de su postgrado, había una ceremonia formal y luego un coktail. Me encontré con Eugenio -mi ex marido- y andaba solo, yo fui con Enrique mi pareja. Llegamos algo atrasados y tuve que quedar de pie, mi ex estaba sentado. La sala del hotel se llenó por completo. Quedamos bastante apretados. Comenzó la ceremonia y los discursos. Habían transcurrido unos 20 minutos y siento que una mano me palpa la rodilla derecha, di un pequeño salto de susto, yo seguía de pie y mi pareja a mi lado izquierdo, a mi derecha sentado Eugenio, mi ex…. Obviamente Eugenio me estaba manoseando. Me quedé tiesa, no supe que hacer, mi vestido era largo pero tenía un tajo justo a ese lado, hacía ...
    ... calor asi es que yo no llevaba más ropa que el calzon; su mano caliente subía, acariciándome los muslos, bajaba hasta la rodilla y volvia a subir, de pronto siento que llega a palparme las nalgas. Soy bien culona, pero hago mucho ejercicio y tengo buenas formas y buena musculatura. Entonces Eugenio me apretaba las nalgas y palpaba todo con descaro y una seguridad impresionante.
    
    Trataba de mirar a Eugenio pero no podía, pero sabia que era él. Su mano jugó con mi culo y con mis piernas. Entonces supe que yo debía hacer algo, o paraba eso ahora o lo dejaba seguir. Entonces me pare con las piernas abiertas y permití que su mano subiera. Exquisito. Me palpó la vagina con suavidad. Yo estaba desfalleciendo de caliente, estaba mojada por completo, también tenía algo de vergüenza pues alguien podía estar mirando o mi pareja podia darse cuenta. Pero nada de eso pasaba. De pronto siento que un dedo ingresa en mi vagina. Eugenio se las había arreglado para rodear mi pierna con su brazo de manera que su mano derecha subia un poco y entraba directamente a mi concha. Bajé mi brazo derecho y le apreté el hombro, como para decirle que parara o más bien para decirle que no parara. Comenzó a agitar su dedo. Yo estaba a punto de tener un orgasmo. Perdí completamente la noción de lo que estaba ocurriendo en la sala. De pronto veo a mi hija que aparece en el escenario recibiendo su diploma y Eugenio retira su mano y aplaude mucho rato, luego vuelve a meter su mano entre mis piernas, esta vez su ...
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